El tusi, una combinación de drogas popularizada primero en países de latinoamérica y luego en Europa como una supuesta nueva droga, ha llegado también a EE UU. El tusi ha ganado popularidad en los últimos años a base de su nombramiento en medios de comunicación y temas musicales y se suele vender en polvo de color de rosa a precios altos, a pesar de que las drogas que suele contener tienen un precio mucho menor.
Los análisis realizados por servicios de reducción de riesgos han encontrado que la mayoría de polvos vendidos como tusi en América y Europa suelen contener ketamina y MDMA en cantidades variables, a veces combinados con otras drogas como cafeína, anfetamina, metanfetamina, cocaína u otras. La novedad de su aparición en EE UU ha sido recogida en un artículo científico titulado Tusi: a new ketamine concoction complicating the drug landscape (Tusi: una nueva mezcla de ketamina que complica el panorama de drogas).
Su autor, el profesor asociado e investigador de drogas en la escuela de Medicina de la Universidad de Nueva York Joseph J. Palamar, recoge en el artículo la información conocida hasta la fecha sobre el tusi. Este recuerda que el nombre tusi proviene del vocablo en inglés para nombrar el 2C-B (leído “tusibí”), otra droga distinta cuyos efectos no tienen nada que ver y cuyas similitudes en el nombre es fuente de confusión contínua entre los consumidores y las autoridades policiales y de salud.
“El fenómeno tusi complica el panorama de las drogas porque tiene el potencial de confundir tanto a las personas que las usan como a los investigadores. Las personas que consumen pueden pensar que la droga es 2C/2C-B, y es posible que no sepan que el brebaje tiende a consistir en ketamina y una amplia variedad de otras drogas. La exposición no intencional a su contenido puede aumentar el riesgo de efectos adversos. El fenómeno tusi también tiene el potencial de complicar la investigación de drogas, ya que la exposición desconocida a drogas como la ketamina y la MDMA conducirá a un subregistro del uso”, explica Palmar en su artículo sobre la llegada de la mezcla a EE UU.