A lo largo del 2019 murieron 226 personas por sobredosis en Cataluña, un 10% más que en el año anterior, en el que se registraron 205 fallecimientos por la misma causa. La cifra ha sido publicada hace unas semanas en un informe elaborado por la Subdirección de Drogodependencias que depende del Departament de Salut de la Generalitat de Catalunya. El informe fue publicado este agosto y aunque los datos corresponden a hace casi dos años son los más actualizados que hay disponibles.
Las muertes por sobredosis son técnicamente registradas como muertes por reacción aguda a una sustancia psicoactiva, y entre estas no se incluyen las muertes en las que la única sustancia ingerida haya sido el alcohol. Para que sea contabilizada dentro de este registro las sobredosis deben haber ocurrido en población de entre 15 y 64 años, estar provocadas por el consumo reciente de alguna substancia que no haya sido usada con carácter médico y que su consumo haya sido intencional.
De las 226 muertes registradas en 2019, 141 casos ocurrieron en la provincia de Barcelona (99 de estos en la ciudad de Barcelona), 39 en la provincia de Tarragona, 30 en la de Girona y 16 en Lleida. La mayoría de personas que murieron fueron hombres (81%), y las edades con mayor mortalidad fueron de los 40 a los 49 (42%), seguida de la década de los 50 años y la de los 30 a los 39 años. La sustancia que más veces estuvo implicada fue la cocaína (69%), seguida de los opiáceos (62%), los hipnosedantes (58%) y el alcohol (52%). La gran mayoría de muertes (70%) se produjo en un domicilio.