Un grupo de científicos de la Universidad de Miami han desarrollado una cepa de la bacteria E. Coli que produce psilocibina, el compuesto activo de las setas psilocibias, responsable de sus efectos alucinógenos. Los investigadores tomaron el material genético de los hongos psilocibios y lo introdujeron en la bacteria E. Coli, con el fin de que esta fuese capaz de reproducir el material genético de los hongos y producir psilocibina.
Después de probar varias combinaciones genéticas y realizar experimentos de optimización en diferentes condiciones el equipo identificó las cepas que mostraron mejores resultados y las sometieron a un proceso final de fermentación. La cepa escogida por los investigadores, bautizada como “pPsilo16”, consiguió producir 1,16 g/L de psilocibina, que es la mayor cantidad de psilocibina producida utilizando un organismo genéticamente modificado, según ha publicado Marijuana Moment. Hasta ahora la producción de psilocibina se ha desarrollado a través de cultivos de hongos o a través de la síntesis del compuesto. Estos procesos, aunque efectivos, pueden ser tediosos (en el caso de los cultivos que requieren mucho tiempo y espacio) o caros (en el caso de la síntesis) comparados con una vía de producción biosintética como la que se ha desarrollado con este procedimiento. Si pensamos que en un futuro próximo podría haber una gran demanda de psilocibina vías de producción como esta pueden ser de gran interés.