¿Nuevo en el barrio de la cultura cannábica y no tienes a alguien que te guíe? ¿Fumar marihuana en un bong parece intuitivo pero luego te ahogas como si hubieses caído en alta mar? Aquí van algunas ideas para el inhalador novato.
Pese a que lo que viene ahora pueda parecer tremendamente obvio para los que ya le dais a la mandanga no os confundais: esto no va para vosotros, sino para las personas que tienen poca o ninguna idea de lo más básico.
Si estamos hablando de inhalar el humo de un porro, lo que estás haciendo con eso es quemar yerba para que la combustión libera un cannabinoide de la planta (el THC o Tetrahidrocannabinol) junto con algunos otros (THC-A, CBD, etc.) que son los que producen los diferentes efectos en nuestro organismo. El humo pasa a los pulmones y los componentes se liberan en nuestro sistema sanguíneo.
Por tanto, para que el cannabis pegue más o menos (si obviamos que la yerba puede tener distinta “potencia”) uno debe mantener el humo que inhala un tiempo en los pulmones. Se compara con inhalar el helio de un globo para que te cambie la voz: para que se produzca ese efecto uno debe mantener el helio en los pulmones durante un rato.
Cuidado porque no es un cigarrillo. Ni se maneja igual en la boca ni uno debe inhalar igual. Son parecidos pero no son la misma cosa. Para ir viendo cuál es tu punto, resulta recomendable probar poco a poco a ver qué tal con pequeñas caladas hasta que sepas qué es lo que te conviene.
Depende de si consumes un porro, un blunt o desde una pipa de agua la “dureza” a los pulmones del contenido varía. Siempre va a haber rozamiento pues estás metiéndote algo que no es el oxígeno que habitualmente consumes para vivir (aunque el nuestro sea ya más polución que oxígeno puro). Por lo general fumar en un bong es más suave aunque más complicado de hacer al principio. Los joints y los blunts son más duros de fumar y más si los mezclas con tabaco pero suelen ser más intuitivos en su uso.
Vapear es distinto. Uno en realidad no está metiéndose el humo de la combustión de la planta sino vapor químico que se produce al calentar a una temperatura muy alta aceite de extracto cannábico. Por lo general es más fácil de tragar (es vapor) pero suele pegar más fuerte, según se ha podido demostrar recientemente con algunos estudios. Por ser vapor uno no se libra de cierta irritación pulmonar, por lo que se recomienda mantener el vapeador a temperaturas razonables en lugar de a las más altas que permita el aparato.