¿Una sesión de dominación con cannabis? Pues si te gusta, ¿por qué no? Veamos algunos testimonios de gente que le gusta juntar ambas cosas.

Para aquellos que les guste practicar sexo con toques (o a tope) de BDSM (Bondage. Dominación y Sadomasoquismo) seguro que no necesitáis que nadie os explique que el cannabis hace buena pareja. Sin embargo, desde Merryjane su redactora Sophie Saint Thomas, que le da al BDSM y a la wea se preguntó cómo lo está haciendo la gente. Entrevistó a algunos de sus amigos cercanos para que le contasen que hacen durante sus sesiones.

Por ejemplo, Mistress Matisse, profesional del BDSM, le comentó que utiliza el cannabis para tanto para completar la experiencia como para que los demás disfruten. Así como el cannabis te transporta a otro lugar el BDSM hace algo muy parecido, dice. Además tanto el BDSM como el cannabis comparte que tienes que saber qué estás haciendo: una mala práctica puede convertir una sesión de este tipo en algo horrible.

Melissa Vitale, publicista, se fuma unos buenos canutos como parte del ritual de después del sexo. La intención es que sirva como recuperación de la sesión de BDSM o del cuidado después del sexo (donde las partes se aseguran que todos están bien y que nadie ha sufrido daños sin consentimiento). También sirve como entrada al sexo; un momento de relax antes de pasar a la acción donde se discuten los límites de lo que va a ocurrir entre el humo del canuto.

Maxine (nombre falso) dice que siempre practica sexo fumada, incluso el que no es BDSM. Además se considera una chica ansiosa de indica y le gusta incorporar esas prácticas durante sus sesiones. Cuenta que en una ocasión el chico con el que estaba “se colocó encima mientras yo estaba atada y me folló la boca. Si hago un buen trabajo él me deja vapear un rato”. Maxine también comenta una práctica [que no recomendamos ni nosotros ni la redactora de Marryjane que se dedica al BDSM] en la que ese chico se quería colocar y para ello introdujo el vapeador en su vagina y comenzó a fumar desde allí de tal modo que al usar sus labios acariciaba el clítoris de esta chica. Añade que eso le dio un punto de humillación bastante ridículo.

Daniel Saynt, colaborador en NSFW (web dedicada a los contactos BDSM), comenta que fumar mientras te hacen una felación es lo más grande. Dice que usa el cannabis de manera habitual en sus relaciones, especialmente en los tríos. Comenta que los supositorios de CBD o THC son muy buenos para el sexo anal pues relajan considerablemente. Comenta que le encanta atar a una chica con cuerdas y darle de fumar cannabis (recordemos, todo esto es consensuado), de esta manera la sensación de cierto pánico por verse atada se reduce.