Un informe reciente de los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC) de EE. UU. revela un cambio en los hábitos de consumo de cannabis entre adultos. Aunque fumar sigue siendo el método predominante, prácticas como el consumo de comestibles, el vapeo y el dabbing están en aumento, especialmente entre los jóvenes.
El estudio, basado en datos del Sistema de Vigilancia de Factores de Riesgo Conductuales (BRFSS), analizó las respuestas de adultos mayores de 18 años a un módulo específico sobre el consumo de marihuana incluido en la encuesta telefónica nacional de 2022. Por primera vez desde 2016, este módulo permitió a los encuestados indicar múltiples formas de consumo, lo que ofreció una visión más completa de las prácticas actuales.
En 2022, el 15,3 % de los adultos declaró haber consumido cannabis, y un 7,9 % lo hacía a diario. Entre los consumidores, el 79,4 % fuma, el 41,6 % recurre a comestibles, el 30,3 % vapea y el 14,6 % practica dabbing. Casi la mitad de los usuarios combinan dos o más métodos, siendo las combinaciones más comunes fumar con comer o con vapear.

Los investigadores advierten que cada vía de consumo conlleva riesgos distintos. Por ejemplo, el auge de los comestibles ha coincidido con un aumento de intoxicaciones accidentales en menores.
El informe también indica que el consumo es más elevado entre hombres, adultos jóvenes (especialmente entre los 18 y los 34 años), personas multirraciales no hispanas, indígenas americanos y personas con menor nivel educativo.
Aunque la ampliación de la muestra geográfica en 2022 ha mejorado la cobertura, los CDC advierten que las comparaciones con años anteriores deben hacerse con cautela debido a los cambios metodológicos introducidos.