El pasado sábado, Alemania vivió su primer 4/20 en un ambiente de legalidad para el cannabis. Según la policía local, unas cuatro mil personas se reunieron en la Puerta de Brandeburgo, en Berlín, para celebrar la jornada con una gran fumada colectiva. Sin embargo, continúan las tensiones con los sectores que se oponen a una apertura total de la planta.
Si bien la flamante regulación integral del cannabis alemana permite el transporte hasta 25 gramos de flores, la Deutsche Bahn, principal empresa ferroviaria del país, anunció que estará prohibido fumar marihuana y hachís en las estaciones de tren. “Basándonos en la prohibición legal del consumo diurno de cannabis en zonas peatonales y en las proximidades de escuelas y parques infantiles, nos gustaría salvaguardar todos nuestros pasajeros en nuestras estaciones, especialmente niños y jóvenes”, anunció la compañía en un comunicado en el que también adelantó que el mes que viene se implementarán nuevas medidas.
De todos modos, el anunció de la compañía férrea no afectó al público cannábico alemán. Una multitud se reunió a celebrar el 4/20 en la Puerta de Brandeburgo, en un evento que concentró a unas cuatro mil personas que disfrutaron de una serie de shows musicales e intervenciones artísticas durante el pasado sábado. Andreas Müller, uno de los activistas más reconocidos, dijo en el escenario que su país “ya no criminalizamos a los usuarios de cannabis” gracias un camino correcto hacia la legalización tras una larga noche de prohibición. Además, los asistentes se manifestaron con diferentes carteles que tenían consignas como “ninguna planta es ilegal” o “¡no todo el mundo quiere colocarse!”.