El que fue el mayor invernadero de Europa dedicado al cultivo de rosas, situado en Garray (Soria), está camino de convertirse en una planta de cultivo de cannabis medicinal. Así lo ha confirmado el presidente de Ondara, una empresa que en 2020 adquirió a través de su compañía matriz Full Moon Investments (EE UU) el invernadero y la planta de producción, que antes era propiedad de Aleia Rosas.
“El tema de cannabis es una planta que se puede cultivar para ser rentable, pero ahora lo que tenemos aquí es una empresa de rosas que funciona, que tiene mercado, que tiene ventas y vamos a continuar con las rosas por muchos años”, dijo el presidente de la compañía en una entrevista con El Día de Soria realizada el pasado octubre, en la que evitó afirmar que se iban a cambiar los cultivos de rosas por el cannabis.
Esta semana el director ha cambiado el discurso a través de la nota de prensa enviada a los medios: “Las rosas no eran rentables y menos en medio de esta pandemia”. Según la nota de prensa difundida, la empresa solicitó en diciembre un permiso para producir y exportar cannabis medicinal a la Agencia Española del Medicamento. Por el momento la Agencia del Medicamento todavía no le ha concedido ninguna licencia a la nueva empresa, y los trabajadores están temiendo por sus puestos de trabajo.
Justo el mismo día en que se publicó la nota de prensa sobre el futuro de la empresa y los preparativos para recibir la licencia de la AEMPS, en la que su director decía que llegaría “en pocas semanas”, la compañía inició la negociación con los sindicatos de UGT y CCOO para lograr un acuerdo sobre los despidos que la empresa quiere aplicar, con EREs que afectarán a 33 personas y ERTEs que afectarán a 192 trabajadores.
La empresa quiere aplicar ERTEs por un periodo de un año mientras espera la licencia de la AEMPS y realiza los trámites y evaluaciones necesarias para certificar que todos los procedimientos cumplen con las normativas europeas. Desde los sindicatos consideran que un ERTE de 12 meses es “excesivo” e “inaceptable” y dejaría a los trabajadores en una situación económica muy complicada.