El uso, la producción y la venta del cannabinoide psicoactivo Delta-8-THC es completamente legal en Estados Unidos, según afirmó hace unos días un importante tribunal estadounidense. La Corte de Apelaciones del Noveno Circuito ha dictaminado que la producción y la venta del Delta-8-THC es legal en tanto que queda amparada por la Ley Agrícola del 2018, que entre otras cosas legalizó y reguló la comercialización de cáñamo industrial y del CBD extraído de la planta.
Según la información publicada por Marijuana Moment, la Corte se pronunció el pasado jueves afirmando que los productos que contienen Delta-8 THC en principio son legales porque la Ley Agrícola dice que “cualquier parte” de la planta del cannabis con menos del 0,3% de Delta-9 THC es legal, y que eso incluye “todos los derivados, extractos y cannabinoides”.
El Delta-8-thc es un cannabinoide psicoactivo que se encuentra presente en la planta del cannabis de forma natural pero en muy poca cantidad. Este cannabinoide empezó a ganar popularidad hace un par de años cuando algunos empresarios empezaron a obtenerlo a partir del CBD extraído del cáñamo y a comercializarlo. El Delta-8-THC se vende mayoritariamente en los estados donde el cannabis no está legalizado, como un sustituto legal del Delta-9-THC (el THC más abundante y conocido por todos). Su forma de obtención es a partir de una semisíntesis utilizando como punto de partida el CBD extraído de plantas.
Este resquicio legal de la Ley Agrícola que no había sido previsto durante su redacción ahora ha sido respaldado por la Corte de Apelaciones. El panel de la corte votó con 3 votos unánimes que por mucho que el Delta-8-THC tenga ”efectos psicoactivos y embriagantes” este cannabinoide entra dentro de la definición de cáñamo que hace la ley.
Poco se sabe de los efectos del Delta-8-THC más allá de los relatos de consumidores, que lo describen como una “marihuana light”. El año pasado varios estados decidieron prohibir el uso del Delta-8-THC debido a su proliferación y sólo Michigan dio el paso de regularlo. Mientras tanto la FDA advirtió de los riesgos de su consumo y más recientemente amonestó a varias empresas por venderlo prometiendo efectos terapéuticos. Junto con la aparición del fenómeno del Delta-8-THC, también han aparecido otros cannabinoides, en este caso de nueva síntesis, como el Delta-10-THC o el Delta-6a10a-THC, que se están vendiendo sin regulación.