Días atrás, Cáñamo publicó que la industria legal del cannabis en España genera unos 500 millones de euros por año. El dato surgió de un estudio económico realizado por CannaMonitor. Pero el informe de la consultora tiene unas 70 páginas y existen otros números igual de relevantes que los del comercio regulado. Por el lado contrario, la venta ilegal de los derivados de la planta mueve mucho más dinero. Se calcula que se trata de unos 2.138 millones de euros, lo que significa que nuestro país es el lugar con el mercado negro de marihuana más grande de toda la Unión Europea.
Según el informe de CannaMonitor, la cifra de las ventas ilegales de cannabis en España supone un 20% de todas las que se realizan en los estados miembros de la Unión Europea. El país que sigue en el ranking es Francia. La consultora ha llegado a la conclusión que el escenario se debe a una “actual situación de impasse” entre la prohibición local y la legalización en otras naciones que empiezan a contemplar una regulación que permita los usos medicinales. “Hay una economía de exportación al mercado ilícito europeo y una gran producción en España que debería hacernos plantear qué hacemos con el cannabis”, dice el autor del estudio, el politólogo Arnau Valdovinos.
El estudio sostiene que la cantidad de incautaciones se han duplicado desde el año 2020. Los principales cultivos de cannabis para la venta ilegal suceden en las provincias del Mediterráneo andaluz, seguidas de Alicante, Valencia, Barcelona y Girona. Además, las últimas dos provincias mencionadas concentran la producción para una posterior distribución europea.
