Los consumidores de cannabis españoles son los más sancionados de toda la Unión Europea. España es el país que más multas impone a sus ciudadanos que usan cannabis, según los datos del último informe del Observatorio Europeo de Drogas. El informe, citado por el diario Público, recoge que España impone el 43% de todas las sanciones por consumo o tenencia de cannabis de toda la Unión Europea.
Los siguientes países que más sancionan (penal o administrativamente) el uso o la tenencia de cannabis son Alemania y Turquía, pero la diferencia entre estos es abismal. Según los últimos datos recogidos en el informe (correspondientes al 2020), ese año en España se realizaron 258.379 intervenciones por uso o tenencia de cannabis, esto es, un 27% más que en Alemania y cinco veces más que en Turquía.
La mayoría de las sanciones que se imponen en España por uso o tenencia de cannabis se aplican mediante la Ley de Seguridad Ciudadana. Con la promulgación de esa ley en 2015 se introdujeron nuevas y más elevadas sanciones para las personas que son sorprendidas en posesión o usando drogas ilegales en la vía pública, y para las que abandonan instrumentos u otros efectos empleados para el consumo.
Estas sanciones se imponen desde entonces con una multa mínima de 600 euros (si es la primera infracción), en casos como la posesión de menos de un gramo de cannabis u otras sustancias, el consumo en la calle o el abandono de utensilios como un grinder. Numerosas organizaciones de la sociedad civil, entre ellas varias dedicadas a las políticas de drogas, llevan años exigiendo la derogación de la ley.