Un reciente estudio de capital importancia publicado en la American Journal of Psychiatry asegura que el CBD ayuda a reducir la dependencia a los opiáceos.
Según los resultados de este importante estudio, el CBD ayuda con dos de las características que se asocian con lo que es una “dependencia” según los criterios médicos: el ansia y el síndrome de abstinencia.
Desde hace unos cuantos años EE.UU asegura verse en lo que llaman “la epidemia de los opiáceos”. Pese al título alarmista hay bastante de razón. Las muertes en los estados unidos por el uso de opiáceos es elevadísimo. Lo significativo de esta “epidemia” es que, al contrario de lo que mucha gente puede pensar, la mayor parte de las sobredosis se dan con productos legales. Las farmacéuticas inundaron el mercado estadounidense de opiáceos fortísimos mediante estratagemas que, en el mejor de los casos, rozaron lo alegal, y en otras, directamente lo ilegal, como la compra sistemática de profesionales de la medicina para que recetases opiáceos incluso en gente a la que no le hacía falta.
Por este motivo, el tratamiento para que la gente deje de tomar opiáceos se ha convertido en prioridad en algunos estados, como es el caso de Nueva York. En este estado si un paciente toma opiáceos está automáticamente cualificado para que su doctor pueda reemplazar ese tratamiento por otro basado en THC o CBD.
El estudio utilizó Epidolex, el primer medicamento con CBD que ha sido permitido a nivel federal por la FDA, para comprobar si este tenía un peso específico en ayudar a la gente con su adicción a la heroína. El estudio encontró que “una administración adecuada de CBD, en contraste con el placebo (que se administró al grupo de control), redujo significativamente el ansia y el síndrome de abstinencia inducido por la presencia de indicadores relacionados con drogas comparativamente con las indicadores neutrales”.
El estudio descubrió algo más, tal vez, mucho más interesante: el efecto del CDB dura hasta 7 días desde que se tomó por última vez. Si esto es así, el CBD, claramente, puede ayudar con la adicción a los opiáceos pues sus efectos no son solo inmediatos sino que se pueden prolongar mediante un tratamiento adecuado.
Pese a que aún quede mucho por investigar al respecto, este trabajo es bastante esperanzador, sobre todo porque ha podido realizarse con un fármaco que ya está a la venta y ha pasado todos los controles de seguridad necesarios.