Jamie Lee Curtis, hija del célebre actor Tony Curtis, reconoce que en una ocasión consumió crack junto a su padre.
En una entrevista que hizo para Variety, Jamie Lee Curtis comentó los problemas de adicción que tuvo durante el pico de su carrera a finales de los años 90. En concreto, su adicción al Vicodin fue considerable. Pero no solo: también le daba a la cocaína, y el alcoholismo rondaba su vida diaria. Su padre, Tony Curtis, también tuvo que pelear toda su vida contra esas dos adicciones.
En una de estas hora de adicción y drogadicción parece que los Curtis compartieron pasta base de coca, el denominado crack.
“Sabía que mi padre tenía un problema porque yo tenía el mismo problema. Ambos compartimos las drogas… fue una época en la que era la única de sus hijas que le hablaba”, comentó la actriz.
Añade: “Hice pasta base de cocaína junto a mi padre. Solo fue esa vez y lo hice con él. Todo esto acabó con él sobrio por un periodo de tiempo y trató de recuperarse de forma bastante activa durante 3 años. No duró mucho, pero se sintió recuperado por un minuto”.
Tony Curtis murió en 2010 pero no le mató la cocaína, sino un paro cardiaco producido por el asma. La mayoría de sus problemas de salud como la cirrosis o sus problemas de hígado se los produjo el alcohol.
Por su parte, Jamie Lee Curtis ya no pelea con ningún abuso de sustancias y permanece sobria desde el 2002, aunque sigue pidiendo que le retiren todas las bebidas de mini bar y acudiendo a reuniones de alcohólicos anónimos.