Agentes de la Guardia Civil de Tarragona intervinieron la semana pasada una veintena de tiendas de venta de semillas y productos para el autocultivo de cannabis, los establecimientos conocidos como grow shops. Las inspecciones se realizaron sobre 19 locales de las localidades de Tortosa, Amposta, Tarragona, Reus, Vila-seca, Valls, Torredembarra, Salou, el Vendrell, Cambrils y Calafell. Como resultado, se intervinieron numerosos productos y se interpusieron un total de 29 denuncias.
Según el medio Canal Reus Tv, las inspecciones han resultado en la intervención de 203 esquejes de marihuana y la inmovilización de 54 envases de productos “fitosanitarios” y 35.199 semillas. Las sanciones por las infracciones administrativas denunciadas pueden acarrear multas que van desde los 300 euros hasta los 3 millones de euros. Además, la policía ha abierto una investigación sobre una persona, a la que acusa de un delito contra la salud pública por el cultivo de marihuana.
No es la primera vez que ocurre una operación coordinada de la policía contra varios establecimientos de venta de productos para el cultivo de cannabis. En los últimos dos años se han producido varias intervenciones de este tipo en diferentes provincias españolas contra grow shops, tiendas de CBD, distribuidoras de productos y empresas de producción de semillas. Sin embargo, las semillas de cannabis y los productos para el cultivo de la planta son legales en España, y desde el sector se denuncia que estas operaciones carecen de fundamento legal y tan solo ayudan a criminalizar actividades empresariales completamente legales y establecidas en España desde hace tres décadas.
