Varios especialistas de la industria cannábica le han asegurado a Cáñamo en varias oportunidades que la aparición de los cannabinoides semisintéticos es producto de la propia prohibición a la planta. Ahora, un reciente estudio logró demostrar que esto es cierto: en EEUU, la búsqueda en internet sobre el delta-8 THC es significativamente mayor en los estados donde la marihuana continúa siendo ilegal.
La compañía CBD Nationwide ha realizado un estudio de análisis en de internet, a través de Google Trends, en el que se descubrió que las búsquedas del delta-8 THC eran 1.9 veces mayor a los estados donde el uso de cannabis para adultos no está permitido. “Esto significa un giro significativo hacia cannabinoides alternativos debido a las prohibiciones del cannabis”, aseguró la empresa.
“La prohibición del cannabis claramente no funciona”, dijo Katie Devoe, directora ejecutiva de la compañía tras la presentación del estudio. Además, la investigación aseguró que “el diferente interés en el delta-8 THC entre estados con diferentes políticas sobre el cannabis fue estadísticamente significativo, con un valor promedio aproximado en 0,00000065 %. Esto significa que es extremadamente improbable que la disparidad en los datos de búsqueda entre estados con cannabis legal e ilegal fuera debido al azar”.
¿Qué es el delta-8 THC? Se trata de un cannabinoide que, por lo general, se extrae del cáñamo y tiene efectos similares al THC, ya que tiene una composición molecular casi idéntica. La única diferencia es la posición de un doble enlace en una única cadena de carbono. Esto genera un cambio en la estructura de la molécula y hace que los efectos en los receptores endocannabinoides sean bien diferentes entre uno y otro. Pero como el delta-8 THC se produce a partir del cáñamo, que sí está regulado federalmente en EEUU, algunas gasolinerias, estancos y tiendas minoristas han encontrado un vacío legal para comercializarlo porque no era considerado una sustancia ilegal. Aunque la Administración de Alimentos y Medicamentos (FDA) de EEUU lo haya prohibido, el producto sigue disponible y es más solicitado donde las fuerzas de seguridad estatales más ponen el foco en prohibir al cannabis.
“El mayor interés de búsqueda en los estados donde el cannabis recreativo es ilegal sugiere un giro hacia estas sustancias alternativas”, sostiene el estudio. “Este comportamiento puede reflejar una búsqueda de vías legales para lograr efectos similares a los de la marihuana tradicional”, cierra.
