Desde el martes de la semana pasada, California, en EEUU, sufre uno de los peores incendios forestales de su historia. Hasta el momento, ya han muerto unas 24 personas y otros miles tuvieron que ser evacuadas. Además, el fuego arrasó con barrios enteros en los cuales se han incinerado al menos unas doce mil edificaciones. Varias de ellas estaban ubicadas en la zona de Pacific Palisades, en donde se encontraban las mansiones de diferentes estrellas del cine, como Mel Gibson, Anthony Hopkins y Paris Hilton, entre otros. Según The Wall Street Journal, uno de los medios económicos más importantes del país, la reconstrucción del estado después de este desastre climático será la más cara de la historia de EEUU, con una estimación superior a los 50 mil millones de dólares (48 mil millones de euros). Esta situación también afecta a la industria del cannabis, tanto para los cultivos de interior que hoy están en pleno crecimiento, como para los dispensarios locales.
“Definitivamente nos estamos viendo afectados por el humo y los cortes de energía”, dijo Adriana V., gerente de inventario de Green Earth, un dispensario en Highland Park, ubicado a pocos kilómetros al suroeste de los incendios de Pasadena. La tienda tuvo que cerrarse durante algunos días por el denso humo que envolvía la zona. Pero otro problema que enfrentan los locales es que se han suspendido las entregas de productos derivados de la planta. “Esos son nuestros proveedores más importantes, por lo que ahora nos falta alrededor de una cuarta parte de nuestro inventario”, dijo Adriana, en diálogo con el medio Cannabis Business Times.
Ian Rassman, director ejecutivo de NORML en Los Ángeles, una de las más importantes asociaciones de cannabis en EEUU, dijo que los cultivos de interior están enfrentando dificultades por los cortes de energía. Las luces tienen que funcionar, la refrigeración es fundamental y los cultivos de interior pueden verse muy afectados por los incendios, incluso si no están en peligro”, dijo Rassman. “He vivido en Los Ángeles durante 39 años y he visto muchos desastres naturales, pero esto es lo más cercano al Armagedón que he visto nunca”, aseguró.
Ante esta crisis climática que se repite todos los años en California de manera cada vez más grave, el Departamento de Control de Cannabis (DCC) del estado ha comunicado que “aquellos que se enfrentan a una amenaza inmediata de incendio forestal no necesitan ponerse en contacto con el DCC antes de trasladar cannabis o productos derivados del cannabis”.