El aceite de cannabis medicinal que le fue confiscado a la activista Emma Appleby le ha sido devuelto por las autoridades del Reino Unido debido a las protestas y voces de disconformidad de activistas y parlamentarios. La activista fue detenida en la aduana del aeropuerto a principios de abril por llevar consigo aceite de cannabis importado desde Holanda para el tratamiento de su hija de 9 años, que padece una epilepsia severa.
La madre y activista importó ilegalmente aceite por valor de 4.500 libras ante la imposibilidad de conseguirlo legalmente en Reino Unido, a pesar de que el cannabis medicinal ya es legal en el país. Después de que trascendiera la noticia del requisamiento varios parlamentarios criticaron al gobierno por las estrictas normas que rigen el acceso a las medicinas cannábicas.
El secretario de salud Matt Hancock fue quien anunció que se devolvería el material medicinal incautado a la familia. Según ha publicado The Guardian la madre expresó sentirse “tremendamente contenta” con la decisión, pero se reafirmó en su crítica al sistema de cannabis medicinal del país: “no está funcionado”, dijo. A pesar de los cambios en la ley los activistas siguen esperando algún compuesto cannábico recetable con cantidades suficientes de THC, mientras que la comunidad médica se sigue mostrando reticente a permitir las recetas de cannabis medicinal, reclamando una mayor investigación que evalúe más ampliamente otros posibles peligros para el cerebro.