El Gobierno de Suiza ha levantado la prohibición de uso médico del cannabis que figuraba en la ley de estupefacientes. Esta semana se ha anunciado el cambio legislativo por el cual ya no será necesaria una autorización excepcional de la Oficina Federal de Salud Pública para la prescripción médica de tratamientos a base de cannabis, un requisito que había sido indispensable hasta ahora.
La ley entrará en vigor el 1 de agosto, y a partir de dicha fecha la decisión de prescribir un tratamiento de cannabis recaerá únicamente en el médico y el paciente. Seguirá siendo necesaria la receta de un médico, pero ya no tendrá que solicitar el visto bueno de la administración. La decisión ha sido tomada para eliminar los trámites administrativos que retrasaban el acceso a los tratamientos para los pacientes, que se estiman que son unos 3000 nuevos cada año.
“La demanda de este tipo de autorizaciones ha aumentado en los últimos años. Estos tediosos trámites administrativos retrasan el tratamiento, y la situación actual ya no refleja la excepcionalidad prevista por la ley de estupefacientes”, ha dicho el Gobierno en un comunicado. Según el comunicado, el cambio legislativo también permitirá el cultivo de cannabis para fines medicinales, algo que queda pendiente de regulación y que será sometido al control de la agencia de medicamentos nacional.