Una universitaria japonesa trató de meter marihuana en su país dentro de un perrito caliente.

La chica regresaba de un viaje en el extranjero y se trajo para Hiroshima un poco de mandanga que quiso introducir disimuladamente en un hot dog. Buen intento, pero no fue suficiente.

El problema no le vino en que la pillasen en su país sino que la chica de 21 años se la atrapó en Shangai en el último tramo del vuelo. La muchacha metió 0.9 gramos de maría dentro del pan como si fuese la salchicha del hot dog. De nuevo: buen intento pero no lo suficiente.

La chica está bajo arresto y aunque no ha negado en ningún momento que fuese suya (los japoneses son de una sinceridad que asusta) sí que ha dicho que olvidó que la llevaba ahí y que no pretendía meterla de contrabando. De nuevo, buena excusa pero no fue suficiente.