Phil Wolfson (Nueva York, 81 años) es una de las personas más interesantes dentro del mundillo de la medicina psiquedélica. No es una de las figuras más conocidas ni de los que se han subido al tren del llamado renacimiento psicodélico. Quizás es porque lleva toda su vida impulsando el avance de la medicina psiquedélica de forma independiente o porque no se ha asociado en los últimos años a las nuevas corporaciones farmacéuticas. Como él mismo dice en esta entrevista, no está a favor en absoluto de la medicalización de los psiquedélicos absorbida por la Big Pharma. 

Wolfson fue uno de los pioneros en psicoterapia asistida con MDMA (éxtasis) durante los años setenta. En 1986, la revista Journal of Psychoactive Drugs publicó un número especial dedicado a la MDMA, cuando acababa de ser incluida en la Lista 1 de la Drug Enforcement Administration (DEA) y, por tanto, prohibido su uso médico. Aunque ya había habido alguna publicación suelta sobre la MDMA por parte de Shulgin o de Grinspoon y Bakalar, ese especial sienta las bases de la reivindicación del uso médico de la MDMA. Uno de los artículos lo firmaba precisamente Phil Wolfson, con resultados de los efectos de la MDMA en un caso de terapia de familia con una persona con psicosis. El año anterior, la DEA incluyó provisionalmente la MDMA en la Lista 1, y durante ese año celebraron audiencias públicas llamando a declarar a expertos, entre los que estaba Wolfson, antes de tomar una decisión. Al finalizar las audiencias, el juez de la DEA, que se llamaba Francis Young, decidió la inclusión de la sustancia en la Lista II, una lista menos restrictiva que, aunque reconoce el potencial de abuso de una sustancia, permite su uso médico. La decisión del juez de la DEA es consultiva pero no definitoria, así que la DEA, desoyendo la sentencia de su juez, decidió finalmente incluir la MDMA en la Lista 1. 

Fundador de la Ketamine Research Foundation (KRF), dedicada a la divulgación e investigación de los usos médicos de la ketamina, Phil Wolfson acaba de estar en Barcelona participando en un curso de formación para médicos sobre las aplicaciones médicas de la ketamina coorganizado por la propia KRF, el Instituto Dr. Sheib y la Clínica Synaptica de Barcelona. Aprovechando también mi presencia en el curso como ponente, no podía dejar pasar la oportunidad de hacerle una entrevista que permitiera dar a conocer su persona y divulgar su trabajo. 

Phil Wolfson tiene ochenta y un años y un problema en la rodilla que le dificulta enormemente caminar, y, sin embargo, ha viajado solo desde San Francisco hasta Barcelona para participar en este curso de formación y estrechar lazos de colaboración con colegas europeos. Es una persona sabia, lúcida, carismática, entrañable, divertida. Hablar con Wolfson es hablar de una historia que queda oculta en el renacimiento psicodélico; me refiero a la labor de tanta gente que hace su trabajo con psiquedélicos mientras las grandes corporaciones luchan por mercantilizarlos y los científicos de universidades de renombre pugnan por ser los más reconocidos. Para ellos va también dirigida esta entrevista. Espero que la disfruten; yo la disfruté muchísimo.

Buenos días, Phil. Primero de todo, gracias por esta entrevista. Para mí es un enorme placer estar ahora contigo porque, cuando era más joven, leí tus artículos e incluso leí tu intervención en las audiencias de la DEA durante el juicio donde debatían la clasificación de la MDMA… 

Sí, era muy joven [risas].

Luego, por supuesto, seguí tu trabajo con la ketamina, así que es un gran placer para mí tener la oportunidad de hacerte esta entrevista. En primer lugar me gustaría saber cómo te enteraste por primera vez de la existencia de la MDMA. 

Recibí una invitación de Sasha y Ann Shulgin para estar en su casa. Fue un camino complejo por el que llegué a ellos, a través de muchas referencias. Estaba trabajando en un hospital psiquiátrico alternativo en los años setenta y ochenta con un tipo de psicoterapia orientada a trabajar procesos psicológicos, de estilo junguiano. Estaba buscando una medicina para un joven que había sido destruido por grandes niveles de medicación que algún psiquiatra criminal le había dado. Finalmente, tuve una sesión de MDMA con Sasha y su esposa.

¿Y empezaste a usarlo desde entonces? 

Sasha y Ann se volvieron muy refinados con el tiempo. Fuimos recopilando metódicamente resultados a lo largo de los años. Se convirtieron en amigos muy cercanos para mí. Teníamos una gran organización en Esalen [Esalen Institute, en Big Sura, California, un centro de referencia en la cultura psiquedélica desde su creación en la década de los sesenta y, hoy día, enfocado en el desarrollo humano sin estar tan centrados en los psiquedélicos]. Se convirtió en el centro de un intercambio psicodélico. Claudio Naranjo fue una de las personas que conoces que estaban allí. Y también Stan Grof y Rick Doblin, que era muy joven en ese entonces. Fue un espectro de personas muy creativo y amplio. Era legal en ese momento, así que teníamos más libertad. Era mucho mejor para el tratamiento. No nos centrábamos en el trastorno por estrés postraumático o la depresión. Gran parte del trabajo era trabajo de relaciones, porque la MDMA era excelente para eso. Estábamos haciendo hongos, 2-CB, MDA, y estábamos aprendiendo cómo trabajar con los psicodélicos.

Abrir el corazón

¿Cuál era la diferencia entre la MDA y la MDMA? Porque la MDMA llegó más tarde. 

La MDMA llegó en 1977. Para cuando estaba con Sasha, teníamos un grupo bastante grande de personas que usaban MDMA. Utilizamos MDA antes, en los años sesenta y setenta. La MDA es una medicina encantadora. Es más alucinógena, un poco más sensual y diferente. Definitivamente, era un empatógeno.

¿Por qué y para qué problemas utilizaban la MDMA en el pasado? 

“Las propiedades de la MDMA abren tu corazón hacia ti mismo. Abre tu verdad sobre las cosas, donde te estás escondiendo, ocultando o reprimiendo material traumático. O lo que no quieres pensar. Tiende a permitirte hacer ese trabajo y luego considerar, en la apertura de eso, otras posibilidades de ser”

Para parejas: si no te llevas bien con tu mujer, quieres mejorar tu vida, si quieres mirar profundamente en tu alma, estás muy deprimido, tienes dificultades matrimoniales, trauma y no puedes detenerlo. Era un uso de amplio espectro. No había particularidad.

¿Cuál era la razón para usar MDMA? 

Las propiedades de la MDMA abren tu corazón hacia ti mismo. Abre tu verdad sobre las cosas, donde te estás escondiendo, ocultando o reprimiendo material traumático. O lo que no quieres pensar. Tiende a permitirte hacer ese trabajo y luego considerar, en la apertura de eso, otras posibilidades de ser.

Y luego vino la prohibición con la DEA. Participaste en una serie de audiencias. ¿Sobre qué versó tu testimonio? 

Intenté mantenerla legal. El testimonio fue sobre el valor terapéutico de la MDMA. La DEA alegaba que había una amplia posibilidad de mal uso. Eso no era cierto. Porque la MDMA es complicada y la experiencia dura horas. No hubo mucho abuso, así que esa fue una afirmación falsa. En la audiencia, el juez encontró utilidad de beneficio médico y estuvo de acuerdo sobre su potencial.

Luego la MDMA se hizo ilegal, pero MAPS comenzó a realizar ensayos clínicos. 

Tomó mucho tiempo. El primer ensayo clínico con MAPS fue con DMT, que fue muy malo. Eso explotó. Fue con [Rick] Strassman. [En DMT: la molécula del espíritu, Strassman cuenta todo el proceso de estudios con DMT. El final de los estudios vino por los conflictos que Strassman tuvo con la comunidad budista a la que pertenecía por investigar con psiquedélicos, a pesar de que muchos de sus colegas budistas se iniciaron en el budismo precisamente después de tomar psiquedélicos. No sabemos a qué se refiere aquí Wolfson cuando habla de “explosión”, pero no fue de tipo administrativo, pues, según cuenta en su libro, cuando decidió dejar de hacer investigación para erradicar dicha conflictividad, tenía protocolos autorizados por la FDA para investigar con otros psiquedélicos]. Luego no se permitió otro ensayo hasta 1999 [se refiere al estudio que inició en 1999 un servidor con MDMA y que fue parado un tiempo después por razones políticas]. Nada sucedió desde el 86 hasta el 99. Luego vino el primer pequeño ensayo con Michael Mithoefer y luego, lentamente, comenzó a abrirse. Pero si lo miras desde 1999 hasta 2024, son veinticinco años intentando legalizar la sustancia, por no remontarnos a 1986, cuando estúpidamente la hicieron ilegal.

Participaste en uno de estos ensayos recientes usando MDMA para personas con enfermedades mortales. 

Sufrimos una pérdida, mi hijo mayor murió, y Rick lo sabía [Wolfson escribió un libro en memoria de su hijo, muerto a la edad de dieciséis años por leucemia: Noe: A Father-Son Song of Love, Life, Illness, and Death]. Seguía muy orientado hacia la MDMA hasta que Rick vino a mí. Teníamos un legado de dinero dado para el estudio de enfermedades mortales. Así que diseñamos un ensayo para dieciocho personas, un ensayo psicoterapéutico muy intenso. Lo hicimos en mi casa en el área de la Bahía de San Francisco. Pasamos un tiempo maravilloso y todos respondieron. No fue fácil; había algunos participantes que estaban enfermos. Al final, hubo dos personas que murieron a causa de su enfermedad.

¿Cómo funciona la MDMA para este tipo de personas? 

Soy psicoterapeuta, ante todo. La MDMA es una herramienta con la que trabajar. Podemos tomar MDMA o ketamina por nuestra cuenta sin ningún apoyo. La gente lo hace todo el tiempo. Pero creo que cuando tenemos la posibilidad de expresarnos, de obtener apoyo de personas que saben cómo se mueve la MDMA a lo largo de una sesión de terapia, podemos estimular el crecimiento, el cambio, la conciencia y el desarrollo de una nueva conciencia. Es bueno hacerlo en psicoterapia.

¿Cómo es específicamente beneficiosa para las personas que están al final de su vida?

Abres las puertas a los miedos de las personas, a los sentimientos de ser dejados atrás o a cuestiones de justicia social: ya no tengo empleo, estoy discapacitado, me siento terrible conmigo mismo, no valgo nada y me tratan mal, no tengo dinero, nadie me ama, ya no soy sexy...; todas las cosas que entran en ese cambio. Luego también tenemos los efectos del tratamiento que nos mantiene vivos y nos hace sobrevivir. Estamos creando una enorme población de personas que sobreviven a enfermedades mortales por algún tiempo y aumentando la esperanza de vida. Sin embargo, no tienen ningún apoyo sobre cómo vivir esa vida. Muchos de ellos están físicamente dañados o pueden estar dañados en su sustento o en su relación. Se divorcian o se separan. Hay tantas consecuencias para los sobrevivientes. Algunos de ellos tienen un trastorno por estrés postraumático (TEPT) severo. Algunos tienen daño cerebral o niebla mental. “Cerebro de quimio”, lo llamamos.

Una medicina profunda y legal

Más tarde pasaste a la ketamina. ¿Por qué empezaste a investigar la ketamina?

Bueno, fue al mismo tiempo. Había adquirido mucha experiencia personal con la ketamina durante años. La encontré como una medicina profunda que permite a las personas comenzar de nuevo en sus mentes y dejar de aferrarse. Tengo un trasfondo budista. La ketamina ayuda a abrirse a nuevos sentimientos hacia sí mismo, un nuevo comportamiento y un cambio de carácter. Era la única legal; todo lo demás estaba bajo tierra. Es corta en términos de cuánto dura. Se convirtió en una medicina ideal para usar en la psicoterapia psicodélica. Se puede construir mucha psicoterapia alrededor de ella. Y tiene su propio valor en sí misma.

Y también fundaste la Ketamina Research Foundation (KRF). ¿Cuál es el trabajo que hace la KRF? 

Necesitaba crear una organización sin fines de lucro para poder hacer formación e investigación con ketamina. Quería construir una organización llamada Asociados de Psicoterapia con Ketamina. A medida que los psicodélicos, ¡ojalá!, se vuelvan más legales en general, me gustaría ver que se convierta en Asociados de Psicoterapia Psicodélica, para que practiquemos de esta nueva manera con medicinas alternativas.

Si la MDMA fuera legal, ¿cuál preferirías, la ketamina o la MDMA? 

Son diferentes en términos de cómo usarlas. Podemos usar la ketamina de manera muy flexible y en dosis bajas. No podemos usar la MDMA tan frecuentemente. Creo que se crea un sentido de movimiento con las personas. Ajustamos el protocolo a cómo se mueve la gente y dónde hay un hueco en el que uno de los medicamentos pueda ayudar. Es flexible, tanto si se empieza con MDMA como con ketamina.

¿Y trabajar con ambas al mismo tiempo sería útil? 

Es maravilloso.

¿En qué sentido? 

Es maravilloso porque ambas son excelentes herramientas de psicoterapia, aunque de manera algo diferente. Ofrecen diferentes tipos de oportunidades para el crecimiento y el cambio.

¿Cómo se combinan cuando se utilizan al mismo tiempo? 

No creo que se utilicen al mismo tiempo. Se utilizan por separado porque una anula a la otra. Si estoy abriendo las puertas con MDMA y luego hago una sesión de ketamina, la ketamina tiende a sacar a la gente de la conciencia hacia una conciencia meditativa alternativa. La ketamina se usa con otros psicodélicos al mismo tiempo. La gente la usa comúnmente con MDMA primero y hongos juntos. A veces usan la ketamina para un efecto posterior en el viaje.

Una medicina para la gente

¿Qué opinas sobre lo que está sucediendo con Lykos Therapeutics? [La empresa surgida de MAPS para tratar de conseguir la autorización para usos médicos de la MDMA.]

No me gustan las grandes farmacéuticas. He sido anticapitalista toda mi vida. Creo que era previsible que cuando se fuera a tratar de hacer legal la MDMA y sacarla de la Lista I, donde estaba encarcelada, y tratar de ponerla al menos a la Lista II, la cantidad de dinero que se iba a requerir iba a ser muy grande. Eso es debido a la oposición a ella. Las estructuras van a hacer que sea difícil de hacer. Si echamos la vista atrás y nos preguntamos: ¿cuánto dinero y qué habría que invertir para hacer la fase 1, toxicología, fase 2 y luego la fase 3...? La cantidad de dinero que se iba a necesitar iba a ser muy grande. Luego, si lo vas a convertir en un producto comercial, vas a gastar mucho dinero en la naturaleza de las cápsulas, en la pureza de las BPF [GMP o buenas prácticas de manufactura, una condición técnica exigida por los organismos regulatorios que garantiza la seguridad del producto] y en la distribución. Por lo tanto, se vuelve completamente fuera de control. Rick Doblin, nosotros, queríamos que la MDMA fuera una medicina para la gente. No algo que fuera a costar veinticinco mil dólares por hacer tres sesiones. Al final, todo el enfoque farmacéutico de cualquiera de estas cosas va a ser para la gente un factor muy distorsionante de la naturaleza de la experiencia. También se convierte en un problema financiero. No va a obtener mucho apoyo. Entonces, debido a la naturaleza de las cuestiones reglamentarias y penales y a su ilegalidad, todo empuja a la clandestinidad porque es mucho menos costoso. Compáralo: mil quinientos dólares la sesión o hacer como la gente que la compra en la calle o donde sea que la consigan. Hay riesgo de impureza, pero la gente se va a gastar veinticinco dólares en vez de veinticinco mil.

¿Cuál sería el mejor modelo para introducir la MDMA en la práctica o sistema legal? 

“No me gustan las grandes farmacéuticas. He sido anticapitalista toda mi vida. Creo que era previsible que cuando se fuera a tratar de hacer legal la MDMA la cantidad de dinero que se iba a requerir iba a ser muy grande”

Creo que tenemos que despenalizarla. Todas las distorsiones de nuestras medicinas o el mal uso de la ketamina que ocurre está todo fomentado por el dinero. Tan pronto como el dinero entra, la ketamina en la calle se presenta como un polvo blanco que cuesta lo mismo que la cocaína. ¿Adivina quién se involucra? Personas que quieren ganar dinero. El dinero distorsiona todo. Creo que la conciencia es algo que poseemos. Es nuestra. Deberíamos poder trabajar con nuestra conciencia sin impedimentos. Deberíamos tener educación. Hay muchas drogas malas ahora mismo que están dañando a las personas. Tuvimos ciento tres mil muertes por fentanilo legal en Estados Unidos. ¿Cómo nos ha ayudado la ilegalidad? No lo ha hecho. Lo que nos beneficia son programas que ayudan a las personas que tienen problemas, porque algunas personas lo tendrán incluso en tiempos legales. La educación, el apoyo y la comunidad son muy importantes.

Ahora estamos viviendo este proceso de ultramedicalización con los psicodélicos: DMT, psilocibina, LSD, MDMA. 

No creo que lleguemos tan lejos. Tenemos que esperar. Ahora mismo estamos viendo si la MDMA va a obtener la aprobación. ¿Cuánto tiempo tardará? Con todo el trabajo realizado, incluso con la FDA observando, la MDMA acaba de sufrir un golpe [Se refiere a una audiencia pública que se celebró el pasado 4 de junio, tres días antes de realizarse esta entrevista, en el que un grupo de expertos fueron convocados por la FDA para que dieran su opinión experta acerca de la autorización de la MDMA para el TEPT. Se votó en contra debido a supuestos problemas sobre la seguridad y la eficacia. Lo paradójico es que MAPS hizo los ensayos clínicos de acuerdo con las directrices y bajo la supervisión estricta de la FDA. Así que nos encontramos con la situación paradójica de que los expertos convocados por la FDA cuestionaron los métodos recomendados por la FDA, lo cual nos lleva a preguntarnos que, si esto es así, ¿cómo es posible que toda la industria farmacéutica esté en la supervisión de una agencia cuyos métodos son cuestionados por expertos independientes?, ¿o es que, como dice Phil, realmente sigue habiendo fuerzas hostiles que no quieren que las drogas ilegales sean utilizadas con fines médicos?] Veremos qué pasa en agosto con la MDMA [este 11 de agosto la FDA tiene que decidir. El panel de expertos era solo consultivo, la decisión final es de la FDA]. No es simple. Todavía hay muchas fuerzas en contra de estas cosas.

El martes pasado hubo una audiencia. 

De eso estaba hablando. El martes sufrimos un golpe. Fue un comité asesor. En agosto hay una audiencia importante. Veremos qué hacen. No tienen que seguir esas recomendaciones. Probablemente seguirán algunas. Estoy cerca de la gente de MAPS. Creo que la gente piensa que va a haber algún retraso o algún requisito para nuevos estudios, ninguno de los cuales es necesario. La parte loca es que la FDA estuvo completamente involucrada en la estructuración de todo el programa desde el principio hasta el final. 

Al mismo tiempo, toda esta medicalización de los psicodélicos sigue protocolos muy rígidos. La psicoterapia asistida con psicodélicos es más fluida y abierta con respecto al paciente. 

Curiosamente, la FDA no se involucra en la psicoterapia. Solo se enfoca en la calidad de la medicina y la seguridad. Así que eso es otro problema. Cómo trabajamos para desarrollar ética dentro de nuestros propios círculos. Hay muchas violaciones, pero no un gran número, de personas que resultan heridas por malos practicantes. No tenemos una manera de mantener a las personas responsables. Eso también es difícil.

Ya para terminar, ¿cómo te sientes en Barcelona y más específicamente en este curso de formación? 

Me encanta estar aquí. Todos se sienten como mis amigos. Estamos estableciendo un punto de apoyo en Europa, que es por lo que vine. Quiero que el valor de este trabajo se difunda. Europa ha estado muy atrasada en esto por muchas razones diferentes. El liderazgo en la Clínica Synaptica y aquí, en la formación, es maravilloso. La gente es genial. Son muy progresistas y reflexivos. Son muy buenos con los psicodélicos. Creo que podemos construir juntos una aplicación más amplia en Europa para la psicoterapia asistida con psicodélicos porque es importante para Europa. Es importante para Asia, América Latina y América del Norte.