Días atrás, la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, anunció un total de 95 medidas que su gestión pretende poner en marcha durante los próximos meses. La batería de iniciativas fue presentada en la Asamblea de Madrid el pasado jueves durante su intervención en el Debate del Estado de la Región e incluyen iniciativas como la reducción de impuestos, la implementación de planes de vivienda y el Plan Regional contra las Drogas.
Entre algunas de las medidas que incluyen el Plan Regional contra las Drogas de Ayuso se encuentra la modificación de la actual regulación autonómica de la Ley de Drogodependencias y Otros Trastornos Adictivos para controlar la venta de los derivados del cannabis en las tiendas de CBD a los menores de edad. El punto central es que se exigiría la presentación de una identificación que certifique la edad del comprador. Además, las máquinas expendedoras tendrían que incorporar un sistema para comprobar la identidad del usuario.
También se limitaría la publicidad que no podrá estar a menos de 300 metros de establecimientos educativos no universitarios. En este sentido, tampoco se permitiría asociar el uso de los productos derivados del cannabis con mejoras en el rendimiento físico y beneficios para la salud. La Comunidad de Madrid reforzará las formaciones a los profesores y directores de los establecimientos.
El plan anti cannabis de Ayuso tendría un servicio móvil e itinerante de prevención de las adicciones en los espacios de encuentro de la población adolescente para desincentivar el uso del cannabis, independientemente si esto implica un consumo para tratar diferentes enfermedades.
Por último, Ayuso dijo que la Dirección General de Salud Pública de la Comunidad de Madrid está desarrollando desde junio una estrategia dirigida al control, inspección y toma de muestras en establecimientos minoristas de productos alimenticios que contienen derivados del cannabis. En colaboración con los distintos Cuerpos y Fuerzas de Seguridad del Estado, hasta el momento se han llevado a cabo más de 60 inspecciones en una veintena de municipios de la región que se han saldado ya con la inmovilización de casi 100 kilos de productos con derivados del cannabis y casi 25.000 envases de bebidas que contenían los principios activos en la planta.