La Guardia Civil ha detenido este lunes a cuatro trabajadores de la cárcel de Valdemoro, Madrid, por un presunto delito de tráfico de drogas. Según la información publicada por El País, los detenidos están bajo sospecha de haber introducido drogas en la cárcel para los presos, al menos durante la cuarentena por la pandemia de covid-19. No hay detalles proporcionados por el centro penitenciario ni por parte de la Guardia Civil, y el juez a cargo ha mantenido los detalles de la causa en secreto.
La investigación sobre los funcionarios del centro penitenciario se inició durante los primeros meses de la pandemia de covid-19, después de que se detectara una mayor trapicheo de droga entre los presos de ese centro en comparación con otras cárceles. Debido a las restricciones por el virus, la entrada de droga en las prisiones —que normalmente se produce a través de las visitas y los permisos de salida— se vio muy reducida en otros centros penitenciarios, pero no así en el de Valdemoro, lo que despertó las sospechas sobre el personal de la prisión.
Según El País, la policía detuvo a los cuatro trabajadores cuando se encontraban en sus domicilios. También registró las taquillas de los funcionarios en los vestuarios para el personal de prisión, así como dos celdas en que habitan presos conflictivos, en una de las cuales encontraron un teléfono móvil, aparato que no se permite a los presos. Durante la pandemia los precios de las drogas en las cárceles aumentaron como consecuencia de la escasez, como también ocurrió fuera de estas, llegando a duplicarse el precio de algunas sustancias.