Tan solo tuvieron que pasar unas horas desde la publicación del proyecto del Real Decreto para habilitar un limitado acceso al cannabis medicinal para que la gestión de Madrid, a cargo de Isabel Díaz Ayuso, vuelva a cruzar al Ministerio de Sanidad. Este último caso estuvo a cargo de Fátima Matute, la consejera de Sanidad, quien adelantó que va a realizar un análisis exhaustivo del documento, junto a la comunidad científica alineada a su ideología.
“Desde la Consejería de Sanidad estamos estudiando el borrador con nuestro equipo. Desde luego, vamos a hacer todas las alegaciones pertinentes contando con las sociedades científicas que están trabajando con nosotros y los profesionales para que esto no sea una puerta de entrada a un uso inadecuado del cannabis y sus derivados”, dijo Matute, quien se mantiene firme a la confrontación con Mónica García, ministra de Sanidad.
A pesar de que García ha invitado a la gestión de Ayuso a que apoye su proyecto de regular el acceso del cannabis medicinal, Matute ha reclamado que no fueron invitados a trabajar en conjunto en la normativa. “Nos hubiera gustado que hubieran trabajado con nosotros en una mesa con todos nuestros técnicos de Salud Pública y los consejeros de Sanidad; haber compartido en qué consistía esta norma y poder haber hecho aportaciones antes de ser anunciado en un desayuno”, dijo sobre una iniciativa que fue anunciada a principios de este año.
Matute ha sostenido que, a pesar de las intenciones de ampliar el acceso del cannabis a los pacientes de determinadas patologías, la Comunidad de Madrid se mantendrá firme con su Plan Antidrogas, anunciado por Ayuso semanas atrás y que pretende restringir a las tiendas de CBD en la capital española. “Es nuestra obligación trabajar en este plan”, sostuvo la consejera de Sanidad.