Brittney Griner es una jugadora profesional de baloncesto de EEUU y una medallista olímpica junto a la selección de su país. Además, es un símbolo de la cultura cannábica ya que estuvo presa casi un año en Rusia, después de que la policía local le descubriera productos derivados de la planta para uso medicinal cuando arribó al aeropuerto de Moscú. Por este motivo iba a ser una de las oradoras principales en la Cumbre de Liderazgo de Mujeres en Crecimiento dentro de la industria del cannabis. Pero tuvo que cancelar su participación después de descubrir un mensaje amenazante en la habitación del hotel donde se hospedaba, en el estado de Maryland y donde transcurría el evento.

"Cárcel de bebés gay", fue el mensaje que le pegaron con cinta en la habitación del hotel en donde se hospedaba, en una clara alusión violenta a su orientación sexual, ya que Griner es abiertamente lesbiana. “Women Grow y nuestra comunidad están siendo atacadas en un intento de perturbarnos, intimidarnos y silenciarnos. Esta no es solo una amenaza contra una persona, es una amenaza contra todos nosotros. Esto es inaceptable”, dijo Chanda Macias, directora ejecutiva de Women Grow y una de las organizadoras del evento.
“Brittney Griner llegó para estar con nosotros, pero se sintió insegura debido a los objetos y palabras amenazantes que le dejaron en la habitación del hotel. Por su seguridad, decidió regresar a casa”, dijo Macias sobre una escalada fascista internacional que lidera el actual presidente estadounidense Donald Trump. Cabe destacar que, recientemente, el mandatario aseguró que en el país solo respetará dos géneros: el masculino y el femenino. Esta intolerancia hacia las diversidades sexuales motiva a que diferentes individuos se sientan motivados a cometer actos violentos como el que padeció días atrás la propia Griner.