El verano pasado, la policía del estado de Nuevo México, en EEUU, encontró una granja clandestina que tenía miles de plantas de cannabis. En el operativo tuvieron otro sorprendente hallazgo. En el lugar también había varias decenas de trabajadores chinos que se encontraban en pésimas condiciones de salud. El hecho se conoció hace días, tras una investigación realizada por el medio NPR.
Según el testimonio de los trabajadores chinos, ellos contaron que habían sido traficados a la mencionada granja que estaba ubicada en el condado de Torrance. Una vez en el lugar, fueron obligados a trabajar en condiciones esclavas, sin recibir una paga y con mínimas raciones de comida. Además, vivían en condiciones insalubres, entre el hacinamiento y la falta de condiciones sanitarias dignas. “Se veían desgastados. Estaban muy, muy asustados”, dijo Lynn Sánchez, directora de Life Link, una organización sin fines de lucro de servicios sociales en el estado de Nuevo México.
“Había un influencer que me enviaba constantemente mensajes con sus recibos de sueldo en California, en los que se mostraba como ganaba entre 4,000 y 5,000 dólares al mes, y me contaba lo fácil que era”, contó L., uno de los chinos encontrados en la granja clandestina de cannabis. Atraído por la oportunidad económica, esta persona se puso en contacto con un agente para llegar a EEUU y ponerse a trabajar en un cultivo de cannabis. “El viaje estuvo lleno de innumerables pruebas y tribulaciones”, dijo el chino que primero viajó hasta Ecuador y, luego, se desplazó en buses, barcos y una larga caminata por la peligrosa selva del Tapón del Darlén hasta llegar a América del Norte.
Las autoridades estadounidenses aseguraron que el viaje que hizo el mencionado chino es una ruta utilizada regularmente por los migrantes sudamericanos y caribeños que ingresan ilegalmente a EEUU. A partir de cifras oficiales, se calcula que unos 37 mil chinos han cruzado la frontera sur del país de forma ilegal en los últimos diez años. En el último tiempo, muchos de ellos terminaron trabajando en condiciones esclavas en cultivos clandestinos de cannabis.
El operativo donde se encontraron varias decenas de chinos esclavos sucedió en una granja llamada Bliss Farm. Hasta el momento, las fuerzas de seguridad no han encontrado a los responsables del cultivo. Sin embargo, no es el único caso. Diferentes investigaciones periodísticas realizadas por ProPublica, un medio de comunicación sin fines de lucro, existirían vínculos entre diplomáticos chinos, el Partido Comunista chino y empresarios estadounidenses para que lleguen al país cientos de miles trabajadores chinos para que se conviertan en mano de obra esclava.