Por primera vez en EEUU, un estado habilitó una sala de consumo seguro de drogas. El espacio se encuentra junto al campus del Hospital de Rhode Island en Providence, y fue inaugurado el pasado martes, a poco más de tres años que se aprobara una ley local que creó un programa piloto para los Centros de Prevención de Sobredosis (OPC).

Este espacio de consumo seguro de drogas será gestionado por la organización de reducción de daños Project Weber/RENEW y la asociación VICTA que provee atención a las personas que padecen trastornos por adicción a sustancias. Allí, también trabajarán investigadores de la Universidad de Brown para documentar el progreso de este lugar que pretende combatir la epidemia de opioides en EEUU que causa miles de muertes por año.

“El objetivo es identificar cómo funcionan los OPC en EEUU. Si están funcionando, ¿qué los hace particularmente útiles para las personas? ¿De qué manera conectan a las personas con el tratamiento y la atención de las adicciones? ¿Cómo se pueden integrar mejor en una comunidad que se ha visto duramente afectada por la crisis de sobredosis del país? Esas son algunas de las cosas que nos gustaría desentrañar”, dijo Brandon Marshall, profesor de epidemiología de la Universidad de Brown, en diálogo con el medio Marijuana Moment.

Este OPC en Providence no será el primero en funcionar en EEUU. Existen varias experiencias sostenidas por el activismo en reducción de daños por el uso de drogas, pero también la ciudad de Nueva York inauguró el año pasado dos espacios de este tipo. Sin embargo, la sala de consumo seguro en Rhode Island es la primera del país que tiene el apoyo estatal después de haber promulgado una ley en 2021 que estableció la creación de un programa piloto de OPC.