La historia del hombre sentenciado en 2011 a 17 años de prisión por marihuana
Cory Ladd fue sentenciado a 17 años de prisión por posesión de media onza de marihuana.
Cory Ladd fue sentenciado a 17 años de prisión por posesión de marihuana en 2011. Un policía detuvo su coche porque Ladd llevaba una luz estropeda y encontró media onza de marihuana. 17 años de cárcel por media onza…
Ladd fue víctima de dos situaciones muy injustas: por una parte, las leyes excesivas en contra de la posesión de marihuana que estaban vigentes en 2011. Por otra, un juez que decidió castigar con la peor pena posible un delito menor. Si Ladd hubiese sido detenido en 2017 solo hubiese tenido que pagar una multa de 80$.
La excusa para meter en la cárcel la friolera de 17 años a Ladd fue su anterior condena por posesión de LSD (ni siquiera venta o crímenes violentos, no: solo posesión). El juez se sirvió de este dato para declarar a Ladd “delincuente habitual”.
Pese a que a Luisiana se la conoce como uno de los estados más represivos en cuanto a leyes, esto fue increíblemente duro incluso para lo que allí suele pasar. Después de que saliese la condena los abogados de Ladd apelaron la sentencia. Delitos mucho más graves se penan con menos años de cárcel que lo que le cayó a Ladd por media onza.
Durante las apelaciones de enero para tratar de sacarle de la cárcel los fiscales del estado llamaron a Ladd “traficante de drogas” de los que amenazan a los “niños más jóvenes”. Fucking bananas, que dicen los yanquis.
Pese a que el juez emitió un veredicto a favor de Ladd y en la sentencia quedó por escrito su disconformidad con las leyes de Luisiana, los fiscales, que deben ser unas personas muy aburridas, siguieron persiguiendo a Ladd hasta la Corte Suprema como si fuese Pablo Escobar Gaviria. Por fortuna para Ladd se desestimo pero sigue siendo un exconvicto para la sociedad y además debe cumplir el resto de su condena haciendo servicios a la comunidad. Es decir, vivir en libertad vigilada por media onza.
Suena bien pero, como alertan en High Times, la libertad condicionada puede uno saltársela en cualquier momento si se es un poco descuidado, o si el encargado de vigilarla es muy estricto. Pero bueno, al menos está fuera de la cárcel.
Las leyes en Luisiana son ahora mucho más flexibles pero siguen siendo de las más duras de los EE.UU. Entre 2 y 5 años de prisión obligatoria por posesión de 2.5 libras o más de marihuana o vender cualquier cantidad. Casi nada…