Los dos centros de consumo de drogas seguro inaugurados en Nueva York a finales del mes de noviembre ya han conseguido evitar más de 100 sobredosis. Así lo ha comunicado la organización OnPoint NYC, encargada de gestionar los dos únicos centros de este tipo que existen en todo EE UU. En las dos salas los usuarios pueden acceder a agujas limpias y otros utensilios para el consumo, así como al fármaco naloxona para revertir las sobredosis en caso de emergencia y a programas de tratamiento para las adicciones.
Según dijo la organización, entre el 30 de noviembre y el 23 de enero se evitaron 114 sobredosis. En ese tiempo en los dos centros se registraron 585 personas y se utilizaron un total de 4974 veces. “Aunque la cantidad de intervenciones por sobredosis es un hito significativo, mi personal y yo no vemos la cantidad, vemos a las personas hermosas con las que trabajamos detrás de la estadística: el participante que lucha contra la adicción y trata desesperadamente de conseguir un trabajo para comprar regalos navideños para su hija o el participante cuya familia se ha dado por vencida y ahora está buscando desesperadamente un sistema de apoyo para ayudarlos a superar el trauma”, dijo Sam Rivera, director ejecutivo de Onpoint NYC.
La apertura de los centros ha comportado las quejas de vecinos de los barrios colindantes que aseguran que ven un impacto negativo en sus comunidades. “Los residentes de Harlem tienen derecho a pensar: ‘Dios mío, ¿todos van a venir aquí ahora?’ Porque somos los únicos, al cien por cien”, dijo el director ejecutivo de los centros. “Recuerden que respondimos a la necesidad de la comunidad. Creo que la gente se olvida de eso. La gente dijo que no quiere que haya gente que consuma drogas en su comunidad. No quieren ver jeringas y parafernalia, en sus parques o en las escuelas”, explicó a NY1.
En diciembre el Gobierno de los Estados Unidos anunció que entre abril de 2020 y abril de 2021 100.000 estadounidenses murieron de sobredosis. Los fallecimientos por esta causa aumentaron en un 28,5% respecto al mismo período del año anterior y se trata de la mayor cifra de fallecimientos por reacción aguda a drogas jamás registrada en el país. El aumento de las muertes coincide con el inicio de la pandemia, cuyas consecuencias sociales, sanitarias y económicas tuvieron un efecto negativo en la situación de las personas con adicciones.