En Polonia, el cannabis sigue siendo una sustancia prohibida. Sin embargo, el uso medicinal es legal desde el año 2018. Lo único que se permite es la compra de derivados terapéuticos en las farmacias, a partir de la prescripción de un profesional de la salud. En este país no existe una industria nacional de la planta, por lo que los productos son importados. Se trata de un mercado que no para de crecer, por lo que las autoridades sanitarias duplicarán las habilitaciones para el ingreso de los fármacos para el año que viene.
Según documentos oficiales de la Inspección Farmacéutica de Polonia a los que tuvo acceso el medio Business of Cannabis, en 2024 se importaron un total de 5.267 kilos de flores de cannabis. Ahora, el organismo elevará la cifra hasta los 11 mil kilos para el año que viene, a partir del crecimiento de la demanda de las empresas que compran flores para elaborar los aceites, cremas y otros derivados de la planta que se comercializan en las farmacias.
El Centro de Salud Electrónica de Polonia sostiene que el mercado de cannabis medicinal se ha disparado en el país durante los últimos años. Mientras que en 2019 se habían importado unos 26 kilos de flores, cuatro años más tarde la cantidad de cogollos que ingresaron al país se elevó a poco más de dos toneladas. En este mismo período, el número de pacientes también tuvo un incremento significativo de 1.698 personas hasta las 90.297 que acceden a productos terapéuticos derivados de la planta.