Una reciente información de Associated Press (AP) descubre que se están utilizando cannabinoides sintéticos en productos etiquetados como CBD extraído del cáñamo.
En resumen, AP ha descubierto que en algunos casos se está cambiando productos que se espera que tengan un efecto medicinal por otros que son potencialmente peligrosos.
Por lo que se puede leer en algunas informaciones, esta práctica se ha detectado tanto en cartuchos de vapeadores y en comestibles como en los osos de gominola con cáñamo. Al vapeo le está cayendo una bien grande entre esto y los casos de la enfermedad que está afectado a la gente que vapea en los EE.UU y que se ha achacado al acetato de vitamina E.
Se sospecha que el problema surge debido al creciente interés que el mercado del CBD ha tenido durante los últimos años. Algunos proveedores han preferido abaratar costes a riesgo de afectar la salud de sus compradores. Este problema se ha visto amplificado debido a que las empresas dedicadas a supervisar la calidad de los productos no dan abasto debido al escaso personal y que se carece de leyes precisas para estos trámites. Esta situación ha favorecido, como no podría ser de otro modo, que estos desaprensivos cuelen productos peligrosos en el mercado con cierta impunidad.
La AP examinó 30 cartuchos etiquetados como CBD que fueron adquiridos en diferentes partes de los EE.UU. El resultado es preocupante: 10 de los 30 cartuchos tenían cannabinoides sintéticos, por lo general los conocidos como K2 y spice. De los 20 restantes, la mayoría no tenía ni siquiera CBD, aunque no se especifican cuál es el número exacto.
De entre los peores que se ha investigado, se señala a los que provee la compañía Green Machine, que vende tanto en California como en Florida y Maryland. Cuatro de los siete cartuchos examinados tenían marihuana sintética de procedencia ilegal. Además, le habían camuflado el sabor para disimular, cosa que podía haber agravado más el asunto si le han puesto acetato de vitamina E.
“Es jugar a la ruleta rusa”, comenta James Neal-Kababick, director de los Laboratorios de Investigación Flora, a cargo de testar estos productos.
Los resultados de la AP concuerdan con otros que las autoridades nacionales han estado haciendo en los 50 estados de la unión. 128 de las 350 muestras recogidas por todo el país tenían cannabinoides sintéticos en lugar de CBD. Algunos de estas muestras eran de comestibles (los mencionados ositos) y otros eran cartuchos para el vapeo. En algún caso se encontró Fentanilo, una potente droga que fue de uso legal hasta hace poco y que es unas diez veces más potente que la heroína. Al Fentanilo se le atribuyen 30.000 muertes en los EE.UU en el año pasado.
En Luisiana, la policía local ha advertido de que se han encontrado gominolas etiquetadas como CBD y que en realidad llevaban spice o K2. La policía ha advertido a la población para que esté atenta pues desconocen si puede tratarse de casos aislados o se espera que esto sea la punta del iceberg de algo que está aún por salir.