La velocista Sha'Carri Richardson ha quedado definitivamente excluida de los Juegos Olímpicos de Tokio y no podrá competir en ninguna prueba. Richardson fue suspendida de su clasificación para los 100 metros lisos hace poco más de una semana por un positivo en consumo de cannabis, pero muchos esperaban que sí pudiera clasificarse para los relevos porque en teoría la suspensión de 30 días no alcanzaba a la clasificación para esa prueba.
Tras conocerse la decisión, el ejecutivo de Estados Unidos y la Agencia Antidopaje del país mostraron mensajes de apoyo a la velocista. A finales de la semana pasada, la secretaria de prensa de la Casa Blanca, Jen Psaki, quien se había negado a condenar la primera sanción una semana antes, dijo que la decisión de excluir a la deportista de la prueba de relevos “apestaba”. “No creo que haya una mejor definición”, expresó en declaraciones reproducidas por Marijuana Moment, en las que también apuntó la necesidad de “echar otro vistazo” a la normativa sobre el uso de cannabis en los deportistas.
Por otro lado, la Agencia Antidopaje de EE UU emitió un comunicado en el que también expresaba la necesidad de revisar la normativa respecto al consumo de cannabis. “El gobierno de EE UU tiene un asiento en la mesa para expresar comentarios y continuará defendiendo a los atletas, [pero] en última instancia estamos sujetos a las reglas de la [Agencia Mundial Antidopaje]. Esto es cierto incluso en casos tristes y difíciles como este, donde podríamos adoptar un enfoque diferente si la elección fuera nuestra. Si bien las reglas aquí son claras, es una situación terrible”, dijeron desde la Agencia Antidopaje estadounidense.