La Audiencia Provincial de Sevilla ha dictado una sentencia absolutoria para los tres responsables de un club cannábico de un municipio sevillano que fue intervenido en 2017. La decisión del tribunal confirma la absolución que había dictado con anterioridad el Juzgado de lo Penal número 13. La Fiscalía, no conforme con la primera absolución, recurrió la sentencia y pidió una pena de ocho meses de cárcel para cada uno de los acusados por un delito contra la salud pública.
Según ha publicado el diario Público, la acusación contra los responsables de la asociación cannábica tiene su origen en un registro policial ocurrido en junio de 2017, dos días después de que un agente encontrara marihuana y hachís en los bolsillos de un socio al que cacheó después de que saliera del club. La intervención en el club acabó con la incautación de 177 plantas, 1,3 kilos de cogollos, 62 gramos de hachís y 21 cigarrillos de hachís liados.
La sentencia reconoce el carácter terapéutico de la asociación y la condición de consumidores adictos de los socios, y también que esta funcionaba como un circuito cerrado en el que se sancionaba internamente la venta o distribución del cannabis a terceros con la expulsión de la asociación. También señala que el cultivo para los socios estaba a cargo de una única persona, que se realizaba de forma discreta y que la cantidad intervenida se corresponde con la producción necesaria para abastecer a los socios. Por todo esto la Audiencia considera que no se produjo una conducta que encaje en el tipo legal de delito contra la salud pública. El presidente, secretario y tesorero sí han sido condenados por un delito de defraudación de fluido eléctrico y deberán pagar tres meses de multa cada uno.