El pasado viernes las playas del sur de Menorca se llenaron de grandes fardos de hachís que llegaron a la costa empujadas por el mar. En torno a 50 fardos, de entre 35 y 40 kilos cada uno, aparecieron en las inmediaciones de la playa de Son Saura. Un día más tarde llegaron algunos fardos más en la plaza de Son Bou, sumando en total más de dos toneladas de hachís.
La aparición de los primeros fardos provocó un despliegue de agentes de la Policía Nacional y la Guardia Civil, que acudieron al lugar para incautar los fardos que llegaban a la orilla. Debido al elevado peso de los fardos, el dispositivo policial tuvo que contar con la ayuda de un helicóptero para poder sacarlos del agua. También se desplazó un equipo del Grupo de Especialistas en Actividades Subacuáticas de la Guardia Civil para rastrear la costa en busca de más fardos.
La policía está investigando el caso y por ahora desconoce la procedencia de los fardos hallados. Según la información del diario Última Hora, la investigación está tratando de averiguar si los fardos encontrados el pasado fin de semana están relacionados con otros 19 hallados hace tres semanas en la costa mallorquina, en los municipios de Andratx y Calvià.