Un hombre que conducía por la autovía A-67 de camino a Santander fue detenido por la policía y posteriormente arrestado por los agentes tras descubrir que transportaba numerosos fardos con 300 kilos de hachís en su maletero. Ocurrió durante los últimos días del mes de mayo. El hombre, de 54 años de edad, viajaba junto a su mujer y su hijo de 4 años, y fue detenido por agentes de tráfico por ir conduciendo mientras hablaba por el teléfono móvil.
Los agentes le dieron el alto para imponerle una sanción por conducir mientras utilizaba el móvil, pero una vez que el coche se detuvo y los policías se acercaron a hablar con el conductor, estos percibieron “un fuerte olor compatible con alguna sustancia estupefaciente”, según el relato posterior ofrecido por la Guardia Civil. Ante la sospecha de que el hombre llevara en el vehículo una cantidad considerable de drogas, los agentes de tráfico avisaron a un Equipo de Delincuencia Organizada y Antidroga, que acudió al lugar.
El conductor fue llamado a abrir el maletero de su coche, donde los agentes descubrieron un montón de fardos de hachís que estaban tapados bajo una manta. Más tarde, en dependencias policiales, los fardos de hachís arrojaron un peso total de 302 kilos, según informó el diario Canarias7. El hombre y la mujer fueron detenidos y puestos a disposición judicial, y el juez decretó la entrada en prisión provisional para el hombre y la libertad provisional para la mujer, que quedó al cuidado del hijo de ambos.