Finalmente, el Senado de Australia rechazó el proyecto para legalizar todos los usos del cannabis. Los integrantes de la Cámara Alta votaron 24 a 13 en contra de la iniciativa, en donde principalmente se opuso el oficialismo encabezado por el Partido Laborista y la principal coalición opositora, integrada por los partidos Liberal y Nacional.
A pesar de no haber conseguido la aprobación de la iniciativa, el Partido Verde destacó que su propuesta marcó un avance en el alejamiento del país de la guerra contra las drogas. Por primera vez, Australia debatió un proyecto sobre la legalización de drogas a nivel nacional.
“Hoy dimos un gran paso al dejar de tratar el cannabis como parte de la fallida 'guerra contra las drogas' y, en su lugar, proponer un modelo que sea más seguro, reduzca los daños y rinda frutos para los millones de australianos que solo quieren que lo legalicemos. Los partidos Laborista y de Coalición se unieron para tratar de frenar a Australia en la década de 1950 al bloquear esta reforma desesperadamente necesaria”, aseguró David Shoebridge, senador de los Verdes y principal autor de la iniciativa para regular todos los usos del cannabis en Australia.
Entre los artículos principales del proyecto de ley se buscaba permitir el autocultivo doméstico de cannabis para consumo personal. Además, se pretendía crear un ente regulador de la industria que se encargara de expedir licencias productivas, tanto para fines medicinales como recreativos. También se habrían autorizado la creación de los coffee shop, en donde los adultos podían usar los derivados de la planta en un ambiente social.