El Ayuntamiento de Berkeley, en el estado de California (EE UU), aprobó esta semana una medida para frenar la persecución policial contra el uso de psicodélicos naturales. Los concejales votaron a favor de una resolución que ordena a la policía de la ciudad despriorizar la persecución de los delitos relacionados con el uso, la posesión y el cultivo de todos los psicodélicos naturales y sus principios activos, a excepción de la mescalina derivada del peyote, que ha sido excluida para proteger los usos tradicionales indígenas y su sostenibilidad ambiental.
“Berkeley ha sido durante mucho tiempo un líder en la legislación progresista en lo que respecta a la justicia penal y la reforma del cannabis en particular”, dijo antes de la votación la concejala Sophie Hahn, quién ha impulsado la medida en el Ayuntamiento. “La resolución de hoy se basa en ese legado”. Con esta resolución Berkeley se suma al conjunto creciente de municipios y condados que han aplicado medidas similares para proteger a los usuarios de psicodélicos de la persecucción policila.
El texto de la medida estipula que las fuerzas locales del orden público deben “reducir el uso de fondos y recursos de la ciudad para hacer cumplir las leyes que imponen sanciones penales por posesión de drogas psicodélicas biosintetizadas con plantas u hongos para uso personal y para el cultivo, y por procesamiento y preparación de plantas y hongos que contienen drogas psicodélicas para uso personal”. La medida excluye la posibilidad de regalar, distribuir, vender o administrar psicodélicos a terceras personas.