Un grupo de investigadores coordinados desde el Hospital Clínic y el instituto de investigación IDIBAPS ha establecido que el consumo de riesgo de cannabis aumenta significativamente a partir de cinco porros semanales. Esta es la conclusión que han ofrecido los investigadores después de ponerse como objetivo fijar una cantidad de consumo orientativa que sirva para clasificar el consumo de riesgo de cannabis.
Los resultados son preliminares y pueden ser criticados desde distintos puntos de vista. Sin embargo, otros estudios han concluido que los riesgos derivados del consumo de cannabis son mayores en los casos en que la sustancia se usa a diario y, por tanto, consumir menos de un porro al día puede servir para reducir los riesgos.
Al mismo tiempo, hay que recordar que el consumo de cualquier cantidad de una sustancia psicoactiva conlleva riesgos y también que cada persona reacciona diferente a una misma droga. El consumo de una misma cantidad de cannabis puede resultar un alto riesgo para una persona y no para otra. La evidencia disponible señala que las personas más jóvenes (especialmente las menores de 21 años) y las personas con antecedentes de problemas psiquiátricos corren mayores riesgos si usan cannabis en comparación con el resto de la población.
La estimación de cinco porros que han realizado los investigadores se apoya en la llamada Unidad Estándar de Porro (UEP), un intento de cuantificar la cantidad de cannabis que se consume de media por cada porro. Esta medida fue investigada hace unos años por varios grupos, y los mismos investigadores españoles propusieron fijar la unidad de porro estándar en 0,25 gramos de cannabis o 7 mg de THC. Esta medida ha sido criticada por reducir toda la complejidad fitoquímica de cannabinoides y terpenos presentes en el cannabis a un sólo cannabinoide.