Se cumple un mes desde que se inauguró en Australia el primer servicio fijo de análisis de drogas, y los primeros resultados obtenidos confirman la necesidad de que estos servicios gratuitos existan de forma permanente. En su primer mes de existencia, el servicio situado en Canberra fue utilizado para analizar 58 muestras de drogas distintas y, como consecuencia, 18 personas decidieron que no consumirían sus drogas después de ser informados de que contenían una baja pureza o algún adulterante peligroso.
Según la información publicada por The Guardian, el servicio encontró que de todas las muestras de cocaína analizadas, en ningún caso la pureza superó el 27% de la droga. Además, el 40% de las muestras de cocaína analizadas en realidad no contenía ninguna cantidad de cocaína. Una de las muestras contenía dimetilsulfona (una molécula usada en cosmética), otra era solo azúcar y otras llevaban componentes como el talco.
En el caso de la heroína, todas las muestras contenían la sustancia, con una pureza de entre el 31% y el 63%. Más del 30% de las muestras de MDMA llevadas al servicio de análisis no contenían nada de MDMA, para las muestras de ketamina se observó que la mayoría de las muestras sí contenían la sustancia y entre las de metanfetamina se encontró que una era sólo azúcar.
El servicio de análisis de drogas fijo funcionará durante al menos seis meses, en los que se prestará un servicio gratuito de análisis dos veces por semana. La iniciativa viene precedida de otras pruebas de servicios de análisis instaladas de forma temporal en festivales de música durante el 2019. El servicio estará gestionado por la organización Harm Reduction Australia en conjunto con la Universidad Nacional de Australia y el programa local de abordaje sobre drogas Directions.