En el último año, en España hubo un total de 36,582 mujeres que fueron víctimas de violencia de género. La cifra se mantiene en un constante crecimiento desde el 2020, cuando hubo alrededor de 29 mil casos. Si bien esta es una problemática relacionada a las prácticas machistas y patriarcales instaladas en la sociedad, disparidad económica y otros factores que suceden hace décadas, un estudio científico sugirió una posible herramienta para combatir la situación: el cannabis.
Según un trabajo de la investigadora en políticas públicas Samantha Gene Baldwin, de la Universidad de Georgetown, en EEUU, el consumo recreativo de cannabis reduce la ingesta de alcohol, que es uno de los principales factores que disparan un caso de violencia de género.
“La reducción del consumo de alcohol podría complicar esta relación si la marihuana actúa como sustituto del alcohol. Como el consumo de alcohol es un factor de riesgo mayor para la violencia de pareja que el consumo de marihuana, cualquier reducción en el consumo de alcohol disminuiría el impacto del consumo de alcohol en la violencia de pareja”, sostiene la autora. El estudio se basó en datos del Sistema Nacional de Denuncia de Incidentes (NIBRS) del Buró Federal de Investigaciones (FBI), que incluye detalles de los delitos denunciados a la policía. Baldwin utilizó datos del período 2013-2019 y decidió no incluir datos de la pandemia de COVID-19.
El resultado de los análisis concluye que “la legalización de la marihuana recreativa da como resultado 56,6 incidentes menos de violencia de pareja denunciados por cada 100.000 personas”.