El estado de Illinois ha anunciado que destinará 3,5 millones de dólares provenientes de los impuestos del cannabis para financiar programas de organizaciones que trabajan para reducir la violencia en el estado. El dinero de la financiación está gestionado por el programa Restaurar, Reinvertir y Renovar (R3) creado con la ley de regulación del cannabis recreativo en el estado.
La ley del cannabis aprobada en Illinois estipula que el 25% de los impuestos recaudados por la venta de cannabis deben destinarse a programas sociales para las comunidades más afectadas por la violencia, el encarcelamiento y la pobreza provocadas por décadas de políticas prohibicionistas contra las drogas. Los 3,5 millones de dólares que han sido anunciados ahora servirán para financiar programas de intervención en las calles durante el verano, que son los meses en los que más aumenta la delincuencia.
“Tenemos que abordar las causas fundamentales de la violencia e invertir en las comunidades y las personas que merecen más recursos y oportunidades de los que históricamente se les ha dado”, dijo la vicegobernadora Juliana Stratton en un comunicado de prensa citado por Marijuana Moment. Stratton insistió en que las subvenciones como estas dan oportunidades laborales y sociales para jóvenes y adultos.
El estado batió récords de recaudación de impuestos del cannabis este año superando por primera vez la recaudación por venta de bebidas alcohólicas. Según los datos del Departamento de Ingresos de Illinois, de enero a marzo el estado generó alrededor de 86 millones de dólares en ingresos por impuestos a la marihuana de uso recreativo, mientras que las ventas de licores supusieron un total de 72 millones de dólares en impuestos.