Después de haber sido rechazado inicialmente, el Spravato, un fármaco en spray a base de ketamina indicado contra la depresión severa resistente a tratamiento, ha sido incluido en la Cartera de Servicios del Sistema Nacional de Salud. Es decir, el fármaco estará financiado por la Seguridad Social siguiendo el sistema habitual de precio y reembolso. El fármaco funciona en tan solo unas pocas horas y supone una revolución respecto a los medicamentos antidepresivos disponibles hasta ahora.
El Spravato fue aprobado por primera vez en 2019, tanto por la Administración de Fármacos estadounidense como por la Agencia Europea del Medicamento. Actualmente en Europa su uso está indicado en casos de depresión resistente a tratamiento (combinado con antidepresivos clásicos) y también en casos de emergencia psiquiátrica, como puede ser el riesgo de suicidio, en combinación con terapia antidepresiva oral. Desde el año pasado los sistemas de salud de Francia, Bélgica, Suecia, Alemania, Noruega, Dinamarca, Italia y Finlandia han aprobado su financiación.
En febrero de este año, la Comisión de Precios de Medicamentos propuso no financiar el Spravato aludiendo a “incertidumbres respecto a su valor terapéutico”, así como a la existencia de medicamentos u otras alternativas terapéuticas “a menor precio o inferior coste de tratamiento”. En aquel momento, asociaciones de pacientes y algunos médicos que estaban trabajando con el fármaco se echaron las manos a la cabeza tras comprobar como la Comisión rechazaba el único fármaco aprobado en más de 30 años que ofrece una alternativa efectiva a los tratamientos tradicionales, que solo funcionan en el 14% de las personas con depresión resistente a tratamiento.
"A partir de ahora podemos ofrecer un tratamiento a las personas que sufren las depresiones más graves, aquellas que tras varios tratamientos no acaban de mejorar. Los antidepresivos estándar tienen un mecanismo de acción que tarda entre cuatro y ocho semanas en empezar a tener resultados, y esta terapia aporta un mecanismo de acción que, a las horas de su administración, ya permite ver resultados positivos”, ha dicho a El Confidencial Josep Antoni Ramos-Quiroga, jefe del Servicio de Psiquiatría del Hospital Universitario Vall d'Hebrón de Barcelona.