Las Islas Virginia, que pertenecen a los EE.UU., legalizaron el cannabis medicinal.
El gobernador Albert Bryan Jr. firmó la ley que permite el uso de cannabis terapéutico el pasado martes 15 de enero. Para entrar en el 2019 con buen pie.
Pese a que ahora parezca fácil que suceda una cosa como esta, el camino hasta la legalización ha sido duro. Más aún si tenemos en cuenta que en la votación de 2014 los habitantes de las islas se decidieron en un 56,5% a favor de la legalización. En las islas los políticos se hacen de rogar. Pese a existir proyectos de ley para que la ley entrase en vigor, el Parlamento de las islas los tiró uno tras uno.
La ley, Virgin Islands Medical Cannabis Patient Care Act, permite a los pacientes consumir y poseer cannabis siempre y cuando lo haya recetado el médico. También crea una Oficina para la regulación del cannabis, que tendrá como labor licenciar y regular dispensarios, cultivos, test de laboratorios y productos manufacturados.
Si un paciente tiene alguna de estas condiciones podrá ser elegido por su médico para que pueda tratarse con cannabis: cáncer, glaucoma, SIDA/VIH, hepatitis C, esclerosis lateral amiotrófica, enfermedad de Crohn, cólico ulceroso, Alzheimer, Síndrome de estrés postraumático, traumatismo cerebral, Parkinson, Huntington, artritis, diabetes, dolor crónico, dolor neuropático, náuseas severas, convulsiones, o espasmos musculares severos y persistentes.
Según Marijuana Policy Project, en estos momentos solo Idaho y la Samoa Americana no tienen leyes que permitan la marihuana medicinal. El resto de los EE.UU la permite de manera regulada o se resiste a implantar leyes eficaces.