La República de Fiyi, un país del Pacífico compuesto por 300 islas de aspecto paradisíaco, se ha apuntado a la regulación de la planta del cannabis. El parlamento del país, la única cámara legislativa, acaba de aprobar una regulación del cultivo y producción de cannabis no psicoactivo con un proyecto de ley destinado a impulsar la industria del cáñamo en el país.
El proyecto de regulación ha sido defendido por Aiyaz Sayed-Khaiyum, quien ostenta los cargos de Fiscal General y de ministro de Economía, Servicio Civil y Comunicaciones. Sayed-Khaiyum ha explicado en declaraciones para los medios que la regulación se limita al cannabis de hasta un 1% de THC y que permite la posesión, cultivo, venta, importación y suministro de la planta y sus derivados.
Según el medio FBC, el parlamento ha aprobado la regulación en forma de enmienda, de modo que modifica la ley de drogas para eliminar el cannabis no psicoactivo y todos sus extractos con una concentración de THC de hasta el 1% de la lista de drogas ilícitas. El resto de formas y derivados de la planta del cannabis siguen estando prohibidos en el país. Con este proyecto, el Gobierno pretende impulsar una industria de producción de cáñamo para usos alimentarios, industriales, textiles y medicinales.