La nación africana ha visto durante las últimas décadas cómo su principal industria, la tabaquera, está cayendo año tras año, afectando a su economía.
El 60% de las divisas del país entran por la vía del comercio de tabaco, que supone un 13% del PIB. Para contrarrestar la tendencia bajista de la planta del tabaco, además de por cuestiones éticas y de salud, los legisladores considerarán un proyecto de ley para legalizar la marihuana medicinal y los productos de cáñamo de la misma manera que se está haciendo en Lesotho, Sudáfrica y Zimbabwe.
El miembro del parlamento de Malawi, Boniface Kadzamira, ha impulsado durante mucho tiempo el debate sobre la regulación del cannabis. “Fuimos los primeros en esta parte de África en comenzar a discutir esto. Los países que nos siguieron nos han adelantado y ya han comenzado a emitir licencias”, dijo Kadzamira. Sin embargo, cuentan con una fuerte oposición interna en asociaciones que temen que este sea un primer paso hacia la regulación integral.
Nelson Zakeyu es director ejecutivo de Drug Fight Malawi, una ONG dedicada a la lucha contra las drogas que ve las cosas de otra manera: “Debido a que la marihuana local ya se usa comúnmente en el país, si se legaliza es como si estuvieran diciendo a los jóvenes que la consuman. Y eso es lo que tememos”, afirmó. Sea como sea, para los agricultores que hasta ahora vivían del tabaco y para los pacientes de ciertas dolencias es una solución.