Agnès Buzyn, Ministra de Salud en Francia, ha declarado que el gobierno estaría sopesando cómo hacer que el cannabis medicinal llegue al país.

Francia es el país que tiene las leyes anti-droga más restrictivas de la Unión Europea. Pese a esto, el cannabis para uso terapéutico es legal desde 2013. Que sea legal no significa que funcione: el programa de cannabis medicinal es un desastre.

El Sativex, medicamento de THC-CDB en spray, se receta para la esclerosis múltiple pero el problema está en que la seguridad social solo cubre el 20% del coste (mientras que de otras medicinas para enfermedades serias cubre hasta el 80%) y que tiene precio elevadísimo. Ambas cosas han conseguido causar que nadie comprara. No va mucho mejor con tanto con Epidolex y el sintético de Marinol, otros dos medicamentos que están aprobados y a la venta.

La ministra de salud ha comentado que iniciará una ronda de encuentros con diferentes entidades para sopesar la viabilidad de la venta de cannabis medicinal y que la ley de 2013 sea una realidad. Pese a esto en su discurso no hay fechas concretas que marquen cuándo podría pasar esto.

Sean cuales sean las pretensiones de Agnès Buzyn todo parece indicar que Francia sigue y seguirá sin tomar medidas para legalizar el cannabis, pese a que el Ministro de finanzas Bruno Lemair llama a suavizar las leyes: “son las más duras de Europa y es aquí donde más se consume… algo tenemos que estar haciendo mal”.

En realidad se consume más en España, pero tampoco le vamos a quitar mérito.