Científicos identifican un tipo de mosca “chupasangre” que sienten predilección por la yerba. Para que veáis que los humanos no están solos en esto.
Estas clase de insecto es la “mosca de la arena” que es capaz de transmitir alguna enfermedad como la leishmaniosis. Estas moscas traspasan el parásito desde un animal hasta otro mediante al contactar con la sangre de ambos. Estas moscas, además, tienden a chupar la savia de las plantas, tal vez por su alto contenido en azúcares.
Una de las plantas que más se acercan a chupar estas moscas, tanto que hasta los científicos piensan que es su preferida, es la planta del cannabis. La sabia del cannabis les vuelve locas.
“Inferimos esta preferencia en base al porcentaje sustancial de las moscas de la arena que se alimentan con C. sativa… concluimos que la planta del cannabis es una pequeña fracción de las fuentes de azúcares de cualquier hábitat y que haya tantas moscas que se alimenten de ella significa una atracción de buena fe”, se puede leer en el artículo publicado en Proceedings of the National Academy of Sciences.
Vaya, así que las moscas les va la marcha como a los fumones. Algo tiene que tener la planta sagrada que las atrae a su éxtasis místico.
Dado que estas moscas transmiten una enfermedad tremenda como la leishmaniosis este descubrimiento puede ser fundamental para crear “trampas” que atraigan a estas moscas. Trampas con cannabis.