José Luis Abad falleció tras ingerir el humo de una sustancia extraída de un sapo venenoso, en lo que se ha denominado en algunos medios como ritual místico. Sucedió en la casa de Nacho Vidal en Enguera (Valencia) en 2019. Abad falleció debido a la ingesta de la sustancia de este animal, que en algunos sitios se considera que es muy efectiva para dejar todo tipo de adicciones.
El sapo en concreto es el bufo alvarius, una especie en peligro de extinción que de manera natural produce 5-MeO-DMT. Es decir, produce moléculas de DMT que son muy parecidas a las que uno puede encontrar en la Ayahuasca. La diferencia fundamental entre el DMT de algunos psicodélicos y este, es que los primeros son bastante seguros incluso aunque se abuse de la sustancia. El peligro de sobredosis o intoxicación mortal es bajo o inexistente. Sin embargo, el 5-MeO-DMT no está en esa categoría e incluso en bajas dosis puede producir un paro cardiaco. Todo apunta al consumo de 5-MeO-DMT en el paro cardiaco que produjo la muerte de Abad.
Según se puede leer en El País, Nacho Vidal ha promocionado este tipo de prácticas rituales conocidas coloquialmente como “sapo” en varios vídeos de Youtube. Sin embargo, el abogado de Nacho Vidal asegura que éste nunca “ejerció de chamán” en rito alguno relacionado con la muerte de Abad. “Creemos completamente en su inocencia, pero, como es normal, se están investigando unos hechos. Ahora bien, ni se le ha retirado el pasaporte ni tiene que presentarse ante el juzgado”, ha añadido Salvador a este diario. Según el abogado, el fallecido ya había probado el veneno en una ocasión, sabía que Nacho Vidal había contado su experiencia y "quería volverlo a hacer en un ambiente en el que encontrarse cómodo, es decir, con personas que conozcan o sepan cómo es esa reacción tóxica y que cuiden de uno”, señaló el abogado de Vidal, Daniel Salvador.
Sea como sea, la justicia dirimirá qué pudo suceder en aquel día en cada de Vidal. Lo que sí parece coherente decir es que para enfrentarse a este tipo de sustancias como la 5-MeO-DMT es altamente recomendable tener un conocimiento de las posibles reacciones de la sustancia y, en la medida de lo posible, certificar que uno puede utilizarla de manera responsable.
