La agencia aeroespacial NASA inició una investigación de SpaceX después de que su CEO Elon Musk apareciera fumando cannabis en Internet.
Aunque inicialmente la NASA negó que hubiese iniciado una investigación en SpaceX, sus socios en la carrera espacial, todo parecía indicar que esto estaba relacionado con el podcast filmado en el que Musk se fumó un porro. La NASA manifestó que se trataba solo de una investigación para saber si se estaban cumpliendo todos los protocolos de seguridad necesarios para llevar humanos fuera de nuestro planeta.
Jim Bridenstine, jefe de la NASA, acabó por reconocer en una mesa redonda que la imagen no fue la “más adecuada”, lo que llevó a confirmar las sospechas que algunos medios habían manifestado hacia la actitud de la agencia aeroespacial.
“Hemos tenido unas cuantas conversaciones”, dijo Bridenstine según se puede leer en The Atlantic. “Te lo diré, (Musk) está comprometido con la seguridad como el que más. Entiende que no fue el comportamiento más adecuado y no le vas a volver a ver eso otra vez”.
El “eso” se entiende que es fumarse un canuto en directo.
Puede parecer excesiva el celo de la NASA (que lo es) pero es comprensible su preocupación de cara a la opinión pública porque SpaceX es uno de los responsables de hacer que la gente pueda ir y volver del espacio sin morir. En caso de ocurrir un accidente la NASA cree que se les vendrían encima desde todos lados por esa imagen de Musk fumando. Este organismo, recordemos, depende casi por completo del dinero que recibe del estado.