Los ciudadanos neozelandeses serán llamados a votar en 2020 por doble partida: uno para las elecciones generales del país, y otra para apoyar o rechazar una legalización del cannabis. Así lo anunció a principios de mayo el ministro de Justicia Andrew Little.
Actualmente en Nueva Zelanda hay un gobierno de coalición liderado por el Partido Laborista y apoyado por el Partido Verde. La decisión de realizar un referéndum para votar la legalización forma parte del acuerdo entre ambos partidos, y es una de las condiciones que impuso el Partido Verde para apoyar el gobierno del país. La votación del referéndum se hará sobre la base de un proyecto de ley elaborado previamente, que marcará la tipología de la regulación. El proyecto de ley fijará una edad mínima de 20 años para poder consumir y comprar cannabis para uso recreativo y establecerá limitaciones para el cultivo doméstico.
“Hemos dejado claro desde el principio que un referéndum tiene que estar sustentado en un régimen legal que la gente pueda ver, entender y sobre el que tomar una decisión informada”, señaló la diputada verde Chloe Swarbrick en declaraciones recogidas por InfoLibre. La idea es evitar “cualquier potencial de una situación como el Brexit porque la gente sabrá exactamente qué les depara el futuro y cómo estos cambios se pondrán en práctica”. Según ha explicado el ministro de Justicia el resultado del referéndum será vinculante, pero corresponderá al siguiente gobierno llevarlo a cabo. Nueva Zelanda ya reguló el cannabis medicinal el pasado año 2018.