Aunque parezca mentira, Montana no permitía comprar marihuana en donde uno creyese conveniente. Por supuesto, nos referimos solo a la marihuana para uso medicinal porque en este estado el cannabis continúa siendo ilegal. Y aunque parezca más increíble aún, los 33.000 pacientes registrados debían adquirir el cannabis en el único dispensario habilitado. Es lo que llamaban policía de “atar” al paciente de tal modo de que podían así controlar el tráfico de la sustancia que, como decimos, es legal para uso médico.
Cuando se apruebe la ley se abrirán las puertas a 235 nuevos dispensarios que van a poder vender cannabis. Algo que ya ha sido descrito como “emocionante” por algunos propietarios pues el mercado de posibles compradores se va ampliar considerablemente.
"Creo que será beneficioso para los pacientes y para los proveedores que pueden soportar la libertad del mercado de apertura", dijo a Leafly Tayln Lang, propietario de Heirloom Remedies en Victor. "Espero ser uno de esos últimos hombres de pie después de que el polvo se asiente".
Con una identificación adecuada, la tarjeta de paciente y respetando la distancia social, los habitantes de Montana que estén dentro del programa de uso de marihuana medicinal podrán comprar donde quieran. Les ha costado a los legisladores de Montana diez años dar este paso pero, al fin, se han decidido a darlo.